La inversión de impacto en España encara este dos mil veintitres un año decisivo para recortar distancias con los países de su ambiente cara una cooperación público-privada que asista a encarar con garantías los desafíos que encaramos como sociedad y que pasan por cuestiones tan críticas como la sostenibilidad o la justicia social.
En un contexto dudoso aún en el campo de la inversión, los proyectos que ponen el foco en el impacto cobran más relevancia si cabe y, de la mano de los Fondos Next Generation, semeja que los elementos empiezan a alinearse a fin de que la inversión de impacto despegue por último.
En este contexto, cabe recodar que la inversión de impacto en España cerró 2021 con un volumen de dos mil cuatrocientos millones de euros y se prevé que haya cerrado dos mil veintidos con un desarrollo a doble dígito para las gestoras de capital privado.
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SpainNAB, el consejo consultor para la inversión de Impacto en España, anunciaba el pasado diecisiete de abril el lanzamiento del Task Force de Administraciones Públicas (TF AAPP), un conjunto de trabajo que persigue impulsar la inversión de impacto a través del rol catalizador del ámbito público y promover unas políticas públicas más convenientes que faciliten una mayor movilización de capital cara el ámbito.
D+I e INVERTIA charlan con la vicepresidenta de la entidad, María Ángeles León, en un instante determinante para la consolidación de esta clase de inversión en este país.
¿De qué forma se halla el ámbito del capital privado tras un dos mil veintidos complejo?
La inversión de impacto va a contracorriente, mas no se puede esconder lo que ocurre con carácter general en este ámbito. Cuesta considerablemente más hacer fundraising -acciones desarrolladas para la captación de fondos-, se solventa el tema de Silicon Valley y semeja que se contagian los bancos europeos…
Todo esto produce un estruendos y una inseguridad que invita a muchos inversores a postergar resoluciones. Es tal y como si la oferta de dinero que hay libre estuviese como congelada, y es verdad que soportar estos tirones es complicado para una start-up. Y, en ocasiones, de forma directa, no se puede hacer.
Lo que absolutamente nadie duda es que los private equity y los venture capital levantan menos dinero y, por ende, llega menos al sistema. Sin embargo, contra cualquier pronóstico, la economía no se ha parado. Pensábamos ya antes del verano que todo apuntaba de forma muy negativa, y no ha llegado el orificio negro que aguardábamos.
Y esto favorece la inversión de impacto. Si hay un inversor pensando dónde poner su dinero este año, es muy posible que piense en este ámbito, por el hecho de que, por lo menos, su capital está destinado a una tarea que contribuye a encarar los desafíos de nuestra sociedad, de sostenibilidad, de justicia social.
Hay un peligro derivado de la presente inseguridad mas asimismo es verdad que es el instante de, al menos, ampliar el foco y meditar en de qué forma se puede aportar tu grano de arena.
¿Explica este razonamiento que las entidades estén exactamente ahora sacando fondos con este valor añadido que supone el impacto?
Por supuesto. Si nos fijamos, todos y cada uno de los fondos que salen ahora tienen este componente de impacto: medioambiental, social… Lo poco que se mueve, pasa por acá. Es un año de break even para SpainNAB por el hecho de que hemos alcanzado una madurez importante; prácticamente como anécdota comentamos que ya estamos en un instante en que el ICO nos llama a nosotros y no del revés, como hasta el momento…-sonríe-.
El éxito de SpainNAB este año es el reflejo de una industria, la de la inversión de impacto, que desea continuar ahí pese a lo que esté sucediendo en la economía tradicional
Y es el leal reflejo del posicionamiento del inversor y de la economía social. El ecosistema de emprendedores que conocíamos a fines del dos mil veintiuno, que los apoyabas en ese instante, prosiguen ahí como un solo hombre. Es bastante extendido.
Por eso comprendo que el éxito que tiene este año SpainNAB es por el hecho de que está reflejando que esta industria de la inversión de impacto que nace desea continuar ahí, pese a lo que esté sucediendo en la economía tradicional o general.
¿Es una evolución ya irrefrenable de la inversión? Y, aprovechando la reciente presentación del Task Force de Administraciones Públicas, ¿cuál es el rol de España? ¿Está este país mejor o peor que los países del ambiente en lo que se refiere a cooperación público-privada para la inversión de impacto?
La inversión de impacto es ya irrefrenable. Además, se trata de una evolución natural. Lleva ya muchos años en marcha, si bien acá en España vamos un poco más retrasados, mas hay gente peleando por este ámbito desde hace más de quince años.
Creo que es una corriente irrefrenable, ya lo pensaba el año pasado y el precedente, y con todo cuanto está por venir este año, vamos a probar que verdaderamente es así.
Pero sí, efectivamente, estamos tras nuestros vecinos. Es una de las razones del nacimiento de SpainNAB en dos mil diecisiete. Vimos que Francia, mas asimismo Portugal, estaban más avanzados que nosotros en esta cuestión.
En cooperación público-privada en inversión de impacto estamos tras nuestros vecinos. Francia, mas asimismo Portugal, están más avanzados
Hemos ido trabajando e insistiendo con la Administración en los últimos tiempos y todo se ha cocido a fuego lento hasta el momento en que ahora, asimismo favorecidos por este contexto -crisis, Fondos Next Generation, etc-, se ha producido por último el contacto con la esfera pública y esperamos que podamos ir recobrando el terreno que ya han andado otros países del ambiente en esta materia.
¿No le da la sensación de que los catorce fondos ‘artículo 9’ registrados en la CNMV es un número muy reducido?
Pues en parte, sí. Es un número pequeño por el hecho de que hay tantos fondos que son de impacto que me aguardaba un aluvión más grande. Pero asimismo es verdad que en esos fondos están los de emprendimiento social europeo, que es un vehículo que desarrolló Europa. Ahí hay once fondos y 6 están en España.
Es decir, lo que es de impacto, capital privado y líquido, acá va bien, en comparación con el resto de Europa. Sin embargo, a nivel fondos capaces de hacer reporting de artículo nueve, vamos regular.
¿Qué opina de la normativa europea SFDR Reglamento de Divulgación de las Finanzas Sostenibles y de la pérdida de categoría sustentable o de impacto que están padeciendo muchos fondos?
La legislación y la normativa es aún muy compleja y complica mucho su entendimiento y aplicación. Luego, además de esto, acarrea un costo notable. Y , que eres un fondo, aún te lo puedes proponer a costo de reducir tus márgenes, mas las compañías que están debajo, ciertas están más preparadas y a otras les cuesta mucho.
(Sobre SFDR) Hay un inconveniente en todas y cada una de las partes; una regla compleja, que no es estándar, y si se quiere aprovechar la ocasión más veloz de lo que se puede aceptar, va a haber dificultades
En nuestro caso, que estamos en el ámbito de líquidos, las compañías están con un margen estrecho, comenzamos a medrar… es un reto. Aquellas que lo tienen muy pegado a su negocio, aún se lo pueden proponer, mas las que se dedican a otras cosas, es complicado.
Es un costo que se puede ir asumiendo, mas poquito a poco. Ahora, lo más probable es que ni el fondo esté listo para medir ni las compañías que están abajo.
Es decir, hay un inconveniente en todas y cada una de las partes; la dificultad de la normativa, no es estándar y después, además de esto, si se quiere aprovechar la ocasión más veloz de lo que se puede aceptar, resulta obvio que habrá contrariedades.
Y es una pena por el hecho de que esto no ayuda a absolutamente nadie. Esperemos que haya aprendizajes para todas y cada una de las partes.
¿La inversión bajo criterios ESG o de impacto aporta a los inversores mayores rentabilidades que una que no tenga presente esos criterios?
Todavía no hay un background en el planeta de la inversión suficiente para valorarlo. Es verdad que aún no se puede decir que estas empresas son más rentables, y mira que he buscado siempre y en todo momento con insistencia los informes que lo avalasen.
Está más consensuado que el inmobiliario sí va a ser más rentable por medio de la inversión de impacto, por el hecho de que hay un género de usuario que está presto a abonar un poco más
Yo deseo que sea verdad. Pero no aún no se puede garantizar. Lo que sí se puede confirmar es que han navegado la crisis con más resistencia, esto es, soportan mejor. Pero es cierto que ya hemos pasado el mercado alcista, ya ha habido correcciones y, a lo mejor, en unos 3 años, sí disponemos ya de esos datos para poder asegurarlo.
Y comentando con unos y con otros, hay gente que tiene claro ya que el inmobiliario sí va a ser más rentable, por el hecho de que hay un género de usuario que está presto a abonar un poco más.
Tras los proyectos de Open Value Foundation – Global Social Impact (GSI) ¿Piensa contestar este modelo con otras empresas españolas?
Open Value y GSI vienen de un reparto de beneficios muy específico y muy target de una gestora de fondos de inversión. Y, ¿por qué abrimos fondos de impacto? Pues por el hecho de que procuramos que estos fondos animen a otras gestoras.
Se desea probar que se puede montar empresas rentables, que salen cara adelante. Y animar, como te afirmaba, a que otras gestoras dediquen una parte de sus beneficios a montar estos fondos de impacto.
Y ya para finiquitar, ¿cuál es el mensaje de SpainNAB para la Administración, a fin de que dos mil veintitres sea verdaderamente ese año de despegue de la inversión en España y de la cooperación público-privada en este ámbito?
Queremos que la Administración sea siendo consciente de su capacidad para catalizar. Que se muevan ellos para desplazar, al menos, lo mismo en capital privado. Se trata de hacer innovación social en la Administración, que deje desplazar al capital privado.
Y es que a los objetivos de la Agenda dos mil treinta, no se llega ya con el capital público. Antes sí, ahora es inabarcable. Vamos a ver de qué forma cooperamos para llegar donde la Administración Pública no llega por el hecho de que , como inversores privados, nos hemos percatado de eso. Ayúdanos, y hazlo de una manera muy renovadora, que ya no es donar el cero con siete%, sino más bien inviértelo conmigo.
Eso resulta prioritario, y asimismo cambios legislativos que faciliten que esta nueva economía se vaya abriendo paso.