Inicio de la Competencia Mundial por el Almacenamiento de Energías Renovables

Inicio de la Competencia Mundial por el Almacenamiento de Energías Renovables

Desde 2023, el mundo ha sido testigo de un crecimiento espectacular en el desarrollo de sistemas de almacenamiento de energía con baterías a gran escala (BESS). Massimo Maoret, profesor de Dirección Estratégica en IESE Business School, subraya la importancia de estas instalaciones para completar el ciclo tecnológico de las energías renovables. La razón es sencilla: las energías renovables son intermitentes. «Por la noche no hay sol, y el viento no siempre sopla», explica Maoret. Estos sistemas permiten acumular el exceso de producción y asegurar un suministro constante durante las 24 horas, lo que, a su vez, reduce el coste de la electricidad durante períodos sin producción inmediata al reemplazar tecnologías más caras, como las de gas.

El papel esencial del almacenamiento en la transición energética

Oliverio Álvarez, socio responsable de Energía, Recursos e Industria en Deloitte, advierte que el almacenamiento es una herramienta fundamental para facilitar la transición energética, ya que ayuda a manejar la variabilidad de las fuentes renovables. Además, las baterías proporcionan servicios adicionales al sistema eléctrico, como la regulación de frecuencia y el control de tensión, que son vitales en eventos críticos, como el apagón que ocurrió el 28 de abril.

Entre los factores que están impulsando la implementación de estos sistemas se destacan, primero, la disminución en los costos de las baterías y las ayudas públicas a la inversión. En segundo lugar, la estrategia de «revenue stacking», que permite generar ingresos adicionales por los servicios brindados a los operadores y el arbitraje energético, es decir, comprar energía a bajo costo y venderla cuando el precio es alto.

Rafael Esteban, director global de Desarrollo de Negocio de Acciona Energía, recalca que estos proyectos son esenciales para aumentar la participación de las energías renovables en el mercado a corto y medio plazo. Sin embargo, su éxito varía según el mercado y las necesidades del sector eléctrico. En los países con alta penetración de renovables, las baterías están prosperando. Esteban menciona que, a pesar de la incertidumbre, Estados Unidos muestra resiliencia en su sector de almacenamiento, especialmente con la expansión de centros de datos. Australia, conocida por sus grandes instalaciones BESS, se ha convertido en un referente global, mientras que Chile destaca como el mercado más prometedor gracias a su potencial solar y eólico.

Proyectos innovadores en Chile

Chile está llevando a cabo el ambicioso proyecto Oasis de Atacama, desarrollado por Grenergy, que alcanzará una capacidad de almacenamiento de 11 gigavatios hora (GWh). Esta iniciativa lo posiciona entre los mayores proyectos de su tipo en el mundo y pone de relieve la capacidad del país para atraer inversiones. Grenergy ha movilizado más de 1.300 millones de dólares con el apoyo de 12 bancos, además de contar con acuerdos con fondos como CVC y KKR.

La estructura de financiación sigue modelos de «project finance» que se activan tras la obtención de permisos y contratos de compraventa de energía (PPA). Este modelo ya se está replicando en el centro de Chile con otra instalación de 3,8 GWh y se planea también llevarlo a España, específicamente al complejo solar Escuderos en Cuenca.

Respecto a Europa, Esteban señala la oportunidad que ofrecen los mercados por sus ambiciosos objetivos de energías renovables y los fondos destinados al almacenamiento. Países como España y Portugal emergen como destinos interesantes para integrar baterías en proyectos energéticos en línea con los programas FEDER y PERTE. No obstante, Esteban advierte que es crucial aclarar la situación del acceso a la capacidad, ya que se ha concedido el doble de lo previsto en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC).

Un vistazo a las proyecciones futuras y desafíos

El PNIEC actual establece la meta de alcanzar 22,5 GW de diferentes tecnologías de almacenamiento para 2030, promoviendo tanto proyectos «hibridados» como soluciones autónomas que sirvan a la red. Sin embargo, Álvarez también menciona retos como la adaptación regulatoria, la aceptación social y el riesgo de canibalización si se instalan demasiadas baterías sin una adecuada planificación.

La influencia de China en el mercado de baterías

China domina el sector, produciendo actualmente aproximadamente el 70% de las baterías de litio utilizadas en sistemas de almacenamiento energético, aunque este porcentaje ha bajado del 77% en 2022. Además, controla el 85% de la purificación de las materias primas utilizadas en las baterías. Según Massimo Maoret, esto plantea un doble efecto: por un lado, una drástica reducción de costos gracias a la escala de producción; por el otro, una dependencia que conlleva riesgos económicos y geopolíticos.

En respuesta a estas dinámicas, Estados Unidos y la Unión Europea han implementado marcos legislativos, como la Inflation Reduction Act y la Critical Minerals Act, para incentivar la reubicación de manufacturas. En Europa, se han establecido objetivos de producción y purificación locales con presupuestos estratégicos para devolver al continente la extracción y el refino de materiales críticos.

Esta transición hacia un futuro más sostenible y seguro depende de la capacidad de adaptación de los distintos mercados y de la innovación en tecnologías de almacenamiento energético. La clave será encontrar un equilibrio entre la expansión y la planificación estratégica que asegure la efectividad y viabilidad de estos sistemas en los años venideros.