El panorama geopolítico actual y el auge del proteccionismo en Estados Unidos han llevado a regiones como Cataluña a tomar decisiones audaces. La Generalitat ha fijado un ambicioso objetivo: atraer 6.000 millones de euros en inversión extranjera entre 2026 y 2030. El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, está decidido a recuperar el liderazgo económico de Cataluña, especialmente después de la fuga de empresas durante el procés, y a consolidar su competitividad en mercados internacionales, con un foco particular en Asia.
Un Crecimiento Sostenido
Este desafío implica un incremento del 60% en las inversiones en comparación con el período actual; de 3.641 millones en el quinquenio 2020-2024, se estima que se espera un flujo mucho mayor. Si se alcanzan las metas, se prevé un aumento del 27% en los proyectos establecidos en el territorio catalán. La estrategia incluye la llegada de cerca de 600 iniciativas de inversión que generarían 45.000 nuevos puestos de trabajo y fomentarían la creación de 10.000 filiales de empresas extranjeras.
Miquel Sàmper, consejero de Empresa y Trabajo, subrayó en la presentación de esta estrategia que al menos la mitad de estas inversiones debe dirigirse al sector industrial, especialmente fuera del Área Metropolitana de Barcelona. Un claro ejemplo es la farmacéutica austríaca AGC, ubicada en Malgrat de Mar, y la alemana B.Braun, líder en tecnología médica, que opera en Rubí desde hace 70 años. “Buscamos relaciones sólidas y de largo plazo con un fuerte arraigo territorial,” enfatizó Sàmper, quien también recordó que el 18,2% de los empleos en Cataluña provienen de empresas extranjeras.
Atraer Nuevas Potencias Tecnológicas
Una de las prioridades de la Generalitat es mantener y atraer empresas ya asentadas, así como captar nuevas potencias tecnológicas. Durante su primer año de mandato, Illa ha trabajado para fortalecer las relaciones con Japón y Corea del Sur, que constituyen las cuartas economías a nivel global. Junto a estos, también se han contemplado otros mercados prioritarios como China, India y Estados Unidos, así como países europeos como Alemania, Francia, Reino Unido, Países Bajos y Bélgica, que en conjunto representan el 43% de las filiales extranjeras en Cataluña.
La estrategia de la Generalitat busca ser selectiva en la atracción de la industria, priorizando el sector automotriz para liderar la transición ecológica. Otros sectores clave son el agroalimentario, los semiconductores y el químico, este último especialmente relevante en la provincia de Tarragona. “Nuestra meta es construir una Cataluña industrial, líder en salud y sostenibilidad,” destacó Jaume Baró, secretario de Empresa y Competitividad y consejero delegado de ACCIÓ.
Impulsando el Futuro Innovador
La Generalitat también ha puesto su mirada en alcanzar las 3.000 startups para 2030. Cataluña se ha posicionado como un mercado prometedor para empresas de Inteligencia Artificial y ha captado talento en sectores emergentes como el aeroespacial. En un esfuerzo por avanzar, se lanzará el primer laboratorio europeo de investigación 6G en órbita baja, destacando aún más el potencial innovador de la región.
Con estos planes, Cataluña se perfila como un destino vibrante para la inversión y la innovación en el contexto europeo y global, dispuesta a enfrentarse a los desafíos del futuro con determinación y estrategia.
