Elon Musk es posible que esté tomando resoluciones muy discutidas en Twitter, mas es leal a su palabra. Hace meses afirmó que
dejaría de ser el CEO de la red social de microblogging, solo cuando encontrase a la persona perfecta, y semeja que la ha encontrado. Se trata de
Linda Yaccarino, ex directiva de propaganda de NBC Universal y que aceptará el control, sobre todo, de las finanzas de la compañía que
fue adquirida por el creador de Tesla y SpaceX por cuarenta y cuatro millones de dólares americanos y que estaba padeciendo graves pérdidas.

El propio Elon Musk ha sido el responsable de anunciar este cambio en la bóveda de la compañía en su cuenta oficial de
Twitter
, donde ya es conocido por hacer todos y cada uno de los anuncios referentes a sus empresas e inclusive solicitar la opinión de sus
seguidores sobre el destino de la compañía. En ese tweet, Musk afirmaba que Yaccarino “se enfocará eminentemente en las operaciones comerciales, mientras que
que me enfoco en el diseño de productos y nuevas tecnologías”. Eso quiere decir que Musk no va a dejar de ser parte de la compañía y que proseguirá al
quite en lo que se refiere a resoluciones se refiere, si bien en el tema económico la carga va a ser toda para Yaccarino.

La nueva CEO de Twitter ya ha hecho sus primeras declaraciones, asimismo en su cuenta oficial, diciendo que “durante un buen tiempo me he sentido
inspirada por su visión para crear un futuro más brillante”, agregando que “estoy conmovida por asistir a llevar esta visión a Twitter y convertir
este negocio juntos”.

Yaccarino asimismo bromeó sobre el hecho de que, tras el anuncio de Elon Musk, había ganado nuevos seguidores, y es normal, ya que el nombramiento
la ha puesto en el punto de atención de muchos, ya que su trabajo en Twitter va a ser clave para su desarrollo y supervivencia.

Eso sí, Musk ha dicho que la nueva CEO comenzará en unas 6 semanas y conseguirá el título de directivo de tecnología de Twitter.

Por su parte, NBC Universal asimismo anunció en un comunicado la salida de Yaccarino de la compañía, con efecto inmediato, el pasado
viernes. En dicho documento, la compañía agradeció el trabajo efectuado por Yaccarino en el negocio de ventas de publicidad en la compañía y por el
equipo “innovador y la plataforma que ha construido”.

La pregunta ahora es quién es Linda Yaccarino. La nueva CEO de Twitter se graduó en la Universidad de Penn State y trabajó como presidente de
publicidad global y asociaciones en NBCUniversal, actuando como “el puente estratégico y operativo en la totalidad de las redes, propiedades y unidades
comerciales globales de NBCUniversal”, conforme su perfil de LinkedIn. Su función era la de explotar comercialmente las redes de la compañía, las plataformas digitales y
de transmisión, las asociaciones comerciales y de distribución y las relaciones con los clientes del servicio. Eso incluía la supervisión de sus ventas de
anuncios globales, nacionales y locales.

Durante su trabajo en esa compañía, la nueva ejecutiva de Twitter logró más de cien millones en ventas promocionales y asistió a lanzar el
servicio de transmisión con propaganda de la compañía, Peacook.

Yaccarino se describe a sí como “una conectora, colaboradora y consejera codiciada”, como “una agente de cambio comprometida y
unificadora consumada” en su industria.

Fue asimismo presidente del Ad Council, una O.N.G. que fomenta anuncios de servicio público, consiguiendo el apoyo de
múltiples entidades, entre ellas la Casa Blanca, para diseñar una campaña de vacunación con el Papa Francisco que llegó a más de doscientos millones de
estadounidenses.

Antes de unirse a NBCUniversal, Yaccarino trabajó en la compañía global de entretenimiento Turner.

Yaccarino ha amonestado suavemente a Musk por su toma de resoluciones insolente y su inclinación por emplear las redes sociales para hacer anuncios
que lo ha llevado a tener inconvenientes con los reguladores, diciéndole en un acontecimiento reciente que tal vez se abstenga de hacer publicaciones tras las
3 de la mañana.

Pero el nombramiento asimismo ha provocado las críticas de ciertos usuarios de Twitter, algo que Musk deseó atajar al decir que le diesen una
ocasión a Yaccarino, al paso que señalaba que no abandonaría su política de libertad de expresión en pos de beneficios comerciales.