Las pequeñas y medianas empresas (pymes) son fundamentales en la economía, sin embargo, muchas de ellas enfrentan desafíos en cuanto a su gestión e innovación.

Es común que los emprendedores inicien un negocio basado en su expertise en un área específica, centrándose en la producción de bienes o servicios. Sin embargo, para garantizar el éxito a largo plazo, es crucial que también se dediquen tiempo y esfuerzo a gestionar aspectos como administración, logística, ventas, finanzas y recursos humanos.

El desconocimiento o la falta de experiencia en estas áreas clave puede llevar a situaciones caóticas que impacten negativamente en el crecimiento y la supervivencia de la empresa. De hecho, se estima que el 60% de las empresas cierran en sus primeros cinco años, muchas de ellas debido a problemas en la gestión o en la incapacidad de adaptarse a las demandas del mercado.

La gestión empresarial abarca un conjunto de habilidades que van más allá de la producción, incluyendo estrategia, marketing, ventas, gestión de personal, procesos empresariales y planificación financiera. Es fundamental que los emprendedores adquieran estos conocimientos o busquen asesoramiento y formación especializada para maximizar las posibilidades de éxito de su empresa.

En este sentido, la mentoría se presenta como una alternativa efectiva a la formación tradicional, ya que brinda un enfoque más práctico y adaptado a las necesidades reales de un negocio en crecimiento. Contar con el acompañamiento de un mentor con experiencia puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso empresarial.

En conclusión, para superar los desafíos que enfrentan las pymes en términos de gestión e innovación, es fundamental reconocer la importancia de la formación continua y especializada, así como la búsqueda de asesoramiento y mentoría por parte de emprendedores y empresarios. Pedir ayuda cuando sea necesario puede marcar la diferencia en el camino hacia el éxito empresarial.

Mercedes Cruz Ocaña