En el ecosistema emprendedor chileno, la región del Biobío destaca del emprendimiento nacional por sus características únicas que los han convertido en un polo que capta las miradas de inversionistas y el mundo empresarial de norte a sur del país. En ese contexto, iniciativas como el programa Startup Biobío, que enfoca sus esfuerzos en contenidos formativos y mentorías para el escalamiento e internacionalización de emprendedores regionales, juegan un papel vital en el desarrollo y crecimiento de startups y scaleups que estén cultivando éxitos desde el sur de nuestro país.

Una de las particularidades que destaca en esta zona es precisamente la mirada regional que los emprendedores suelen tener al fundar sus negocios. La conexión y vinculación que proporciona el programa ayuda a cambiar esta perspectiva, brindándoles la posibilidad de ver más allá de sus mercados locales y enfocarse en la escalabilidad y el crecimiento en un contexto global. En ese sentido, la energía y el
apoyo proporcionados por este tipo de iniciativas hacen tangibles las necesidades fundamentales para aquellos que están dando sus primeros pasos en el mundo empresarial lejos de la región metropolitana.

Por otra parte, además de ser una región de un gran tamaño geográfico, se encuentra a una distancia suficiente de la Región Metropolitana que la obliga a tener que desarrollar labores en forma independiente.

Por otra parte, además de ser una región de un gran tamaño geográfico, se encuentra a una distancia suficiente de la Región Metropolitana que la obliga a tener que desarrollar labores en forma independiente, donde desde cierta forma, al tener puertos, aeropuertos, la capacidad de exportar bienes y servicios y ser la segunda potencia universitaria después de la capital, opera como un pequeño país en sí mismo.

En ese sentido, el aporte de eventos como el Demo Day de Startup Biobío radica en la necesidad de fortalecer el ecosistema local. A pesar de que la zona cuenta con diversos actores y universidades que fomentan el emprendimiento, la conexión y sinergia entre ellos sin duda se puede potenciar aún más, uniendo fuerzas y estableciendo una línea conductora que guíe a los emprendedores a lo largo de sus
etapas de desarrollo, facilitando su crecimiento y proyección internacional.

Con esto, no solo impulsa la generación del ecosistema emprendedor pujante, sino que también crea una comunidad que acompaña a los emprendedores en un proceso donde habitualmente se sienten solos. Sin embargo, el beneficio subyacente es más tangible: Se les abre un espacio que les permite compartir experiencias y aprendizajes para nutrir una conversación que resulta en un enriquecimiento colectivo, alentando la creación de redes de contacto y apoyo que son fundamentales para el éxito en el mundo empresarial.

A pesar de que la zona cuenta con diversos actores y universidades que fomentan el emprendimiento, la conexión y sinergia entre ellos sin duda se puede potenciar aún más.

Sumado a aquello, los Demo Days ofrecen una oportunidad única para que los emprendedores presenten sus proyectos a inversores y venture capitals, facilitando el acceso a financiamiento y el crecimiento de sus startups y scaleups. En ese sentido, las fuentes de financiamiento para el emprendimiento en la región históricamente han
estado vinculadas a instituciones como Innova Biobío y Corfo. No obstante, con miras hacia el futuro, es clave trabajar en conjunto para que logremos atraer a VCs y otros inversores ángeles a la región.

Esto no solo para impulsar a las empresas locales, sino también contribuir a la descentralización del ecosistema emprendedor, abriendo nuevas oportunidades para startups y scaleups en regiones más alejadas de la capital. En este contexto, junto con entidades que tienen una visión menos regional y más global, sin duda estaremos abriendo caminos a los emprendedores para que accedan a una red mundial que facilita la internacionalización de sus startups y su inserción a nuevos mercados.