Imagine que su vuelo se retrasa y que, en vez de pasar unas horas agobiantes preguntándose si va a poder hacer a tiempo la reserva del turismo de alquiler y del restaurant, el sistema vinculado a sus reservas se pone en contacto de manera automática con todo el planeta y establece nuevos horarios para comer y recoger el turismo. Este podría ser el futuro de las reservas de viajes usando IA generativa como ChatGPT.
La IA ya se emplea mucho en las compañías en forma de chatbots on-line para asistir a contestar preguntas o dar consejos comunes. ChatGPT, entre otros muchos, se distingue en que puede producir nuevos contenidos para resumir los contenidos on-line existentes.
Es decir, si le solicita que cree un trayecto por el sur de Francia a lo largo de diez días, puede mirar lo que ya está on-line en libros, en webs y en otros recorridos online, producir su trayecto y después contestar de una manera más sociable y conversacional.
Para los agentes de viajes, esto ya es una enorme ventaja, no pues no sepan de qué forma pasar diez días en la Provenza, sino más bien pues escribe el resumen por ellos que entonces pueden alterar ya antes de mandarlo a un cliente: en esencia, hace el trabajo preliminar y ahorra más tiempo.
La nueva versión de ChatGPT-4 ya está libre y va a poder, lo que es vital, admitir imágenes aparte de texto, y describir esas imágenes en detalle. El impacto para los viajes podría ser enorme.
Como describe Skift, imagine estar perdido en una urbe extraña y tomar una foto del sitio en el que se halla. ChatGPT no solo podría asistirle a hallar el camino de vuelta con sencillez, sino asimismo podría darle relatos e historia detallados sobre el sitio en el que se halla y sugerirle lugares próximos que podrían representar que perderse fue algo bueno.
Muchas de las grandes empresas de viajes, como Booking.com y Expedia, esperan que la IA generativa, como se la conoce, va a ser muy ventajosa para el ámbito de los viajes, mas es posible que lleve un tiempo descubrir de qué forma emplearla de forma eficiente.
Glenn Fogel, directivo general de Booking Holdings, ha afirmado que muchas grandes empresas sientan las bases para emplearla en el futuro. Un reto esencial es que «los inconvenientes de cómo conseguir datos en tiempo real de incontables fuentes, procesarlos todos para dar sitio a soluciones inmejorables y después actuar con velocidad en beneficio de los usuarios no se resolverán de un día para otro.»
Del mismo modo, Rob Francis, directivo de tecnología de Booking.com ha declarado que, si bien no se estaban precipitando en el «frenesí» en torno al uso de la IA (como ChatGPT), sí piensan que tiene un objetivo real. Existe el inconveniente de que esta tecnología, al estar en pañales, tiene la capacidad de irritar a los clientes del servicio al contestar de forma incorrecta y de distanciarlos de las marcas antes que las ideas se prueben apropiadamente. Lo peor sería dejar a los viajantes desilusionados. También hay cuestiones de privacidad.
Uno de los mayores inconvenientes para las compañías de viajes es que ChatGPT, por poner un ejemplo, emplea hoy día datos de dos mil veintiuno. Para las organizaciones de viajes eso supone un inconveniente, ya que no puede ofrecer información actualizada sobre restoranes, horarios de trenes o previsiones meteorológicas. Eso quiere decir que las compañías de viajes precisan vincular su tecnología con los datos, algo que Trip.com está procurando hacer para lograr cierta «frescura» en los datos. Además, ChatGPT aún no puede identificar entre datos fiables y no fiables y, a veces, puede suministrar datos sesgados.
Sin embargo, una vez que la información actualizada esté libre para ChatGPT y otros sistemas generativos, es simple imaginar de qué forma una vez que cambie un aspecto de los planes de viaje, va a ser considerablemente más simple mudar el resto, con parcialmente poco agobio.
Está claro que el ámbito de los viajes no es inmune a su impacto y, como cualquier otro ámbito hoy en día, estudia de qué forma emplearlo en su beneficio y de qué forma no quedarse atrás.
San Salvador (El Salvador), 1997. Desde pequeña ha sentido una gran pasión por la escritura y la investigación, lo que la llevó a especializarse en reportajes de impacto social. En su tiempo libre, disfruta de la lectura de novelas históricas y de misterio, y también es una gran amante de la música, especialmente del rock latinoamericano. Además, es una ávida viajera, y ha tenido la oportunidad de visitar algunos países de América Latina y Europa para conocer diferentes culturas y enriquecer su visión del mundo.