Antes de presentarnos y para comenzar a conocernos, deseamos que formes en tu psique la próxima imagen: la salud y la educación de la mano. Para ser más específicos, imagínate que en los institutos se comienzan a dar hablas de salud de una forma que: los jóvenes lo comprendan y lo pongan en práctica, les sea útil a los profesores en su día a día, los institutos tengan un valor añadido y las familias completen este círculo de interés por la salud.
Hola, somos la Asociación SaluDarte Formación, y esto no ha hecho más que iniciar.
Hace prácticamente 1 año, en concreto a fines de mayo del año dos mil veintidos, Betsabé, Adrián y Beatriz transformamos una idea realmente.
La idea era fácil y tardamos poco tiempo en darle forma. Simplemente hizo falta una charla, conocimiento de la realidad y sobre todo estar al pie del cañón en nuestros respectivos trabajos. Betsabé como especialista en el campo hospitalario, atención primaria y sociosanitaria, Adrián en contacto incesante con los intereses, preocupaciones y nosologías de la sociedad como farmacéutico adjunto en farmacias y Beatriz como maestra, trabajando en nuestro objetivo, los institutos y los jóvenes, permitiéndonos saber con perfección de qué manera comunicarnos y hacer llegar mejor nuestras ideas y mensaje.
Lo siguiente fue hallar una necesidad, para nosotros estaba claro y más tras esta crisis asociado-sanitaria mundial que se ha generado tras el SARS-CoV-dos. Esta necesidad es inculcar unos conocimientos básicos sobre salud en la población, a fin de que seamos capaces de hacernos, si bien sea ligerísimamente, cargo de nuestras necesidades más básicas. La sociedad no estaba dispuesta para encarar el COVID-diecinueve por la falta de conocimiento extendido tan brutal en concepto de salud. Los jóvenes salen de los institutos e institutos con muchos conocimientos, mas ninguno sobre su prevención o cuidado de su salud, y es justo en este punto dónde hay que actuar, en los institutos.
Pero como es lógico que llegan las contrariedades, como todo en esta vida, mas sin contrariedades no hay desafíos y sin ellos no hay desarrollo ni mejora. Las barreras primordiales son de qué manera llegar a los institutos y una barrera económica para encarar el gasto de las hablas. Los institutos tienen mil géneros de ofertas educativas, y poco presupuesto para encararlas. Pero para eso tenemos en nuestro equipo una educadora, para asistirnos a romper esas barreras. Por eso debemos buscar algo que ponga en valor y al alza nuestra asociación frente al resto de talleres, y es que cubrimos una necesidad social, aportamos un valor extra al instituto y certificamos que el instituto que da nuestros talleres está implicado y comprometido con la salud de sus pupilos y sus familias.
Esta asociación, de momento, vuela sola. No contamos con ayuda económica externa, ya que para crear los talleres o los cursos no precisamos ese respaldo económico y con nuestra financiación es suficiente. Pero sí nos agradaría contar con financiación externa para facilitarles a los institutos el pago de los talleres y que más institutos se apunten a esta gran iniciativa.
Esto somos. Una idea fácil, un equipo pequeño mas capaz, un compromiso con la sociedad y un saludo, por fin, entre salud y educación. Con la oración de Nelson Mandela siempre y en toda circunstancia presente en nuestra mente: “La educación es el arma más poderosa que tenemos para cambiar el mundo” nos despedimos. Nos vemos en institutos para salud darte.