Cerrar una ronda de financiación de 10 millones de dólares americanos no es una cuestión baladí. Menos, hacerlo este dos mil veintitres es un escenario aún sumamente volátil, con valoraciones a la baja de las compañías que ha mantenido los elevados requisitos de la financiación privada y ha obligado a los emprendedores a sostener la caja a ralla y a decantarse por otras vías de captación de dinero opciones alternativas.

De ahí que Fracttal se haya ganado, por méritos propios, entrar en el escogidos conjunto de start-ups que aún han pegado un buen mordisco a la tarta del capital privado este año. A absolutamente nadie escapa que el ecosistema disfruta de buena salud, motivada por su mayor madurez y resiliencia a la inseguridad, mas los números acreditan que la inversión ha mantenido su tendencia a la contracción este dos mil veintitres. 

Así lo patentizó el informe de Atomico, con una caída de la inversión en start-ups españolas del cuarenta y dos% a lo largo de este año. El informe State of European Tech 2023, publicado el pasado noviembre precisaba al mismo que tiempo que, pese a la tendencia bajista en toda Europa, este país ostenta la cantidad más alta del sur de Europa en concepto de inversión, superando a otros como Italia o Portugal y afianzando su situación en el escenario tecnológico europeo.

[España, lista para remontar: cuarto país europeo en startups financiadas pese a caer un 42% la inversión]

Este escenario ha impactado en el número de unicornios que -no- han emergido en el año que pronto terminará. Atomico asimismo reflejaba que España se queda sin sumar nuevos nombres a una lista que hace ya tiempo quedó congelada -lejos quedó ya aquella ronda de 120 millones que transformó a Factorial en unicornio, allí por octubre de 2022– y es compartido en el ámbito que, por el momento, va a ser bastante difícil engrosa el codiciado listado.

Fracttal era uno de los nombres que sonaba y que, de momento, debe aguardar. Aunque lograr o no la -mediática- categoría de unicornio o es un tema que preocupe y ocupe al equipo dirigido por Christian Struve, el CEO de Fracttal, muy centrado en la estrategia de desarrollo para los dos próximos años.

«El objetivo macro es duplicar todo lo que hemos hecho en estos años en sólo dos, es decir, al final de 2025 queremos tener el doble de ‘revenue'»

Christian Struve, CEO y cofundador de Fracttal

«Claro que nos gustaría, pero ahora no copa nuestro día a día y si llega, será la evolución natural de una forma de trabajar y de crecer», explica a D+I el encargado de la compañía de mantenimiento digital de equipos y activos físicos que ya se ha ganado la cofianza de empresas como Renault, Burger King, Acciona, Unilever, Iberostar, Veolia, FedEx, Oxxo, 3M o Coca-Cola.

Por el instante, prefieren centrarse en continuar medrando en Europa de la mano de sus clientes del servicio y amparados con el balón de oxígeno que supone la nueva ronda, liderada por Kayyak Ventures, en la que, además de esto, la compañía ha recibido nuevamente el respaldo de GoHub Ventures, y la integración de Amador Holdings, sumado a la financiación auxiliar de Banco Bilbao Vizcaya Argentaria Spark, para impulsar su desarrollo y expansión global.

Plan de desarrollo hasta 2025

«El objetivo macro que tenemos es duplicar todo lo que hemos hecho en estos años en dos años, es decir, al final de 2025 el objetivo es tener el doble de revenue -ganancias- que tenemos hoy en día», señala Struve.

Fracttal tiene un fuerte componente latinoamericano. Nació en Chile y desde este país cubren todo el Cono Sur, asimismo tienen presencia en Colombia lugar desde donde atienden a todo el centro de Latam, y cuentan al tiempo con entornos propios en Brasil y México para cubrir la demanda de estos dos macromercados en el continente.

La reciente ronda de diez millones de dólares americanos está dirigida por Kayyak Ventures y recibe de nuevo el apoyo de GoHub Ventures

El objetivo es continuar medrando en Latam tomando como base México y Brasil, las dos economías que más están medrando. «Este es el 50% de nuestro plan hasta 2025. Somos líderes en nuestra categoría pero queremos aprovechar el momentum para seguir creciendo».

Y ¿qué sitio ocupa la inteligencia artificial en la propuesta de Fracttal y en sus ambiciosos objetivos como compañía? Struve lo tiene claro: «Ha habido una evolución gigantesca en la IA. Nosotros ya veníamos trabajando en esta tecnología desde finales de 2019, de hecho, comenzó la pandemia cuando estábamos empezando este proyecto prácticamente», explica.

Mantenimiento predictivo de equipos y activos físicos

Se refiere a la tecnología Predictto de Fracttal, su producto de predicción de fallo. «Para nosotros la IA es la evolución natural del mantenimiento predictivo. La gran mayoría de nuestros clientes no viene de un software, sino de hojas de cálculo, de un Excel… Entonces, pasar de aquí a IA es prácticamente imposible. Por eso les acompañamos en un viaje».

La primera parte tiene parada, como no podía ser de otra forma, en la digitalización. «Aquí, nos centramos en el mantenimiento predictivo y en el correctivo, cuando algo falla».


El mantenimiento predictivo es sumamente crítico para el mantenimiento de vacunas, órganos y otros tejidos en centros de salud.

La segunda capa de madurez se genera al incorporar los sensores y exprimir todo el potencial del Internet de las Cosas (IoT). «Para monitorizar el estado de sus equipos en tiempo real y que cuando haya una falla, o se den las condiciones de que esta llegue a producirse, se solucione todo lo antes posible».

«Imagínense un refrigerador de un hospital con órganos o vacunas. El sensor nos va a avisar cuando la temperatura empiece a variar de forma que algo pueda pasar, y se genera todo un proceso por el que se avisa al técnico, geolocalizado, que esté más cerca del hospital, para que lo solucione».

IA, ¿amenaza o aliada?

«Hemos tenido hasta casos en los que cuando el técnico se presenta en el hospital, la enfermera o el responsable médico aún no era consciente ni de que la temperatura del refrigerador en cuestión estaba variando», reconoce.

¿Será la IA una amenaza para Fracttal y su predición de fallos en equipos? El CEO, cuando menos, de momento, lo descarta: «Nosotros no vamos a generar tecnología de IA, vamos a consumirla y nos queremos concentrar en ser ese repositorio de datos. Hoy tenemos más de 15 millones de activos de los que registramos todo: en qué y cómo fallan, sus sensores, componentes… y ese va a ser el input de Fracttal para dar valor a la inteligencia artificial». 

«La IA no es una amenaza para nosotros, sino que viene a complementar lo que ya hacemos», concluye Struve. Sin sitio a dudas, la compañía encara un dos mil veinticuatro ambicioso, con el jergón que da su reciente ronda y con un campo de desarrollo amplísimo en Latam y sur de Europa de la mano de la IA. Al final, lograr la categoría de unicornio, puede aguardar. Al menos, un tanto más.