Este domingo, una vez más Madrid ha sido testigo de una marcha de agricultores que busca llamar la atención sobre la difícil situación que atraviesa el sector. En esta ocasión, la protesta ha sido liderada por la Unión de Uniones, una organización que ha estado en la vanguardia de las movilizaciones en los últimos meses. A pesar de no ser la portavoz oficial, ha logrado movilizar a familias enteras que han marchado desde el Ministerio de Transición Ecológica hasta el Ministerio de Agricultura, exigiendo medidas concretas para aliviar la crisis.

En esta tractorada, se han podido ver banderas de diferentes comunidades autónomas, jóvenes y niños marchando junto a los agricultores. La variedad de participantes refleja la gravedad de la situación que afecta a todo el sector.

Uno de los puntos clave de la protesta ha sido la crítica a las medidas propuestas por Bruselas, considerando que no abordan directamente las necesidades de los productores. Según Luis Cortés, coordinador nacional de Unión de Uniones, es fundamental centrarse en mejorar la calidad de las cosechas y no solo en reducir las obligaciones medioambientales. La propuesta de la Comisión Europea busca flexibilizar algunas prácticas agrarias para los pequeños productores, pero los manifestantes consideran que no es suficiente.

Agricultores y ganaderos, este domingo en el centro de Madrid. Rodrigo Jiménez (EFE)

La lucha de los agricultores no termina aquí. Están atentos a la reunión del Consejo Europeo en marzo y mantienen la presión sobre el Gobierno para lograr cambios efectivos que beneficien al sector. Tras una primera manifestación en febrero, esta segunda convocatoria ha reunido a agricultores de diversas regiones que comparten la misma preocupación: la competencia desleal en las importaciones, la vigilancia en la cadena alimentaria y la simplificación de la Política Agraria Común.

Es indudable que el sector agrícola necesita soluciones urgentes. Como Secundino Juan, Marcela y tantos otros agricultores en España, la incertidumbre sobre el futuro los impulsa a alzar sus voces y exigir cambios que garanticen condiciones dignas de trabajo y un futuro sostenible para las generaciones venideras.