Es fundamental actuar de manera urgente para reducir la brecha de innovación en las startups europeas, según expertos del ecosistema emprendedor. En una jornada organizada por Google y South Summit, se discutió el Informe sobre el Futuro de la Competitividad Europea, resaltando la necesidad de potenciar la competitividad y la innovación en la Unión Europea.
Antonio Roldán, director del ESADE Center for Economic Policy, destacó que parte de la solución para cerrar esta brecha radica en fomentar la innovación en un entorno dinámico. Además, la colaboración público-privada se mostró como un factor clave para mejorar la escalabilidad de las startups.
En este sentido, es importante destacar que más del 50% de las pymes en la UE enfrentan obstáculos regulatorios como su principal desafío. Permitir un mercado único en la UE y una mayor coordinación entre los Estados miembros se señalan como acciones cruciales para proteger la competitividad y los puestos de trabajo en la región.
Óscar López, ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, resaltó la importancia de la colaboración entre la Administración y el sector privado para impulsar el crecimiento de las empresas emergentes. La Ley de Startups en España, que ha atraído a numerosos nómadas digitales y empresas, se mencionó como un ejemplo positivo de este enfoque.
La transformación digital debe ser inclusiva y responsable, alcanzando a todos los sectores de la sociedad. En este sentido, se ha hecho hincapié en la necesidad de encontrar un equilibrio entre el marco regulatorio y la innovación para garantizar un desarrollo sostenible.
La colaboración entre las administraciones públicas y las empresas privadas se destaca como un elemento clave para el avance en el ecosistema emprendedor. A pesar de la resiliencia demostrada por las startups españolas, se enfrentan a una competencia cada vez mayor en el ámbito internacional.
Expertos y líderes en el sector, como Verónica Pascual, Miguel Arias, María Benjumea, entre otros, han coincidido en la importancia de actuar con urgencia, fomentar el talento europeo y mejorar la escalabilidad de las startups para cerrar la brecha tecnológica y mantener la competitividad en el mercado actual.