¿Cómo es posible que un país con contrastes tan marcados, como Colombia, pueda mantener su felicidad a pesar de la pobreza? En este artículo, exploraremos el viaje de Mateo Martínez Alcázar, un emprendedor comprometido con la transformación de ciudades para un futuro inclusivo y próspero. A través de su experiencia y visión, descubriremos cómo las ciudades pueden ser el motor del cambio social y económico.

El Entorno y su Impacto en el Desarrollo: Colombia, en el 2021, se destacaba como el país más feliz del mundo, aunque sus estadísticas económicas mostraban una realidad muy diferente. El bajo salario mínimo situaba al país en una posición rezagada en comparación con otras naciones. Este contraste plantea una pregunta crucial: ¿qué sucede en Colombia y cómo se pueden superar estos desafíos?

Inversión en Infraestructura para el Crecimiento: Las estimaciones oficiales sugieren que una inversión del 0,5% en infraestructura puede aumentar el crecimiento del PIB colombiano en 0,8 puntos porcentuales, generando empleo y mejorando la calidad de vida. Si bien es un paso en la dirección correcta, aún queda mucho por hacer para cerrar la brecha económica.

El Poder del Entorno: Napoleón Hill afirmó que nuestro entorno es nuestra zona de alimentación mental. Para Mateo Martínez Alcázar, este concepto se hizo evidente cuando la discapacidad visual de su hermano lo impulsó a crear la fundación «M+S Inclusión y Comunicación». Esta organización no solo abrió puertas para las personas con discapacidad, sino también inspiró a Mateo a forjar un camino hacia un futuro inclusivo y próspero.

Ciudades Inteligentes y Barranquilla: La experiencia de Mateo en la inclusión social para personas con discapacidad le permitió comparar dos mundos: el de las Ciudades Inteligentes y el de su ciudad natal, Barranquilla. En Barranquilla, la felicidad era un compromiso, donde el entorno debía ser un motor para el desarrollo de todos, sin importar las diferencias.

Responsabilidad y Transformación: El cambio no puede ocurrir si la responsabilidad se evade. Mateo Martínez Alcázar abogó por evitar la costumbre de «tirar la pelotita» de un lado a otro cuando surgían problemas ambientales, educativos, de movilidad o culturales. Su enfoque era claro: «ese asunto no es mío» no era una opción. En lugar de cambiar la cubeta cada vez que se llenaba, era necesario cambiar el techo para solucionar el problema de raíz.

El Papel de las Ciudades en el Desarrollo: A lo largo de los últimos dos siglos, las ciudades en todo el mundo han experimentado transformaciones significativas. Más allá de sus actividades económicas, es esencial que cuenten con un auténtico sistema de desarrollo que promueva un cambio positivo en el entorno y sus habitantes.

Un Futuro Inclusivo y Próspero: Mateo Martínez Alcázar, actualmente finalizando su MBA y especializándose en Smart Cities, trabaja con el sector público y privado en España y Colombia. Su objetivo es convertir los espacios urbanos en lugares inclusivos que fomenten el desarrollo personal y social. La visión no es simplemente cambiar celdas por universidades, sino transformar prisiones en empresas y convertir reclusos en profesionales.

En resumen, la transformación de las ciudades es una tarea desafiante, pero Mateo Martínez Alcázar demuestra que es posible. Ladrillo a ladrillo, se construye un camino hacia un futuro más inclusivo y próspero. A través de su compromiso y visión, Colombia y el mundo pueden mirar hacia adelante con esperanza y determinación para lograr un cambio significativo en la sociedad y en el entorno urbano.