Ha surgido un nuevo debate en torno a la credibilidad de las herramientas de análisis blockchain. Específicamente, Chainalysis, una firma de análisis de blockchain respaldada por Wall Street, ha encontrado su software central bajo un severo escrutinio.

Una nueva investigación pone en duda la reputación de la empresa y el futuro de las técnicas de investigación de criptomonedas.

¿Es confiable el análisis on-chain de Chainalysis?

Chainalysis saltó a la fama al ofrecer herramientas de software que ayudan a las fuerzas del orden a rastrear el flujo de fondos cripto potencialmente ilícitos.

Su clientela es sólida, con agencias gubernamentales que abarcan 50 países entre sus 1,200 clientes. Pero ahora, un caso de alto perfil cuestiona seriamente la legitimidad de la empresa.

En el centro de este torbellino se encuentra Roman Sterlingov, un ciudadano con doble ciudadanía sueco-rusa, arrestado por supuestamente operar Bitcoin Fog. Según documentos judiciales, este servicio ayudó a ocultar las transacciones con criptomonedas para actividades delictivas durante una década.

De hecho, Bitcoin Fog manejó más de 1,2 millones de BTC, por un valor aproximado de 335 millones de dólares durante el período de la transacción.

La mayor parte de esta suma se originó en mercados de la darknet. Según los datos, estaba vinculada a actividades de drogas ilícitas, fraude y uso indebido cibernético y robo de identidad.

En particular, ocurrió cuando los ciberdetectives estadounidenses se propusieron desenmascarar al operador de Bitcoin Fog. El software de Chainalysis fue su herramienta preferida, analizando muchas transacciones de Bitcoin Fog. ¿Pero fue esta confianza equivocada?

A medida que se acercaba el juicio de Sterlingov, su defensa organizó un desafío público notablemente vigoroso contra las metodologías de Chainalysis.

Los abogados afirman que Chainalysis es “ciencia basura”

El abogado Tor Ekeland encabeza esta ofensiva, denunciando oficialmente las herramientas de Chainalysis como “ciencia basura que no pertenece a un tribunal federal”.

En el contexto de un tribunal, la “ciencia basura” se refiere a información presentada como científica y fáctica pero que carece de los métodos y estándares rigurosos de los esfuerzos científicos legítimos:

“[En] la tabla resumen de la exposición al mercado de la darknet de Bitcoin Fog, estas cifras parecen estar basadas en la heurística de Chainalysis Reactor para la cual el Gobierno no puede producir tasas de error conocidas, ni tasas de falsos positivos, ni tasas de falsos negativos, ni ninguna tasa de pares”.

Por lo tanto, Ekeland alega que el software Reactor (el orgullo y la alegría de Chainalysis) ha hecho suposiciones erróneas sobre los movimientos de fondos cripto. En su perspectiva, estas suposiciones han conducido a la falsa incriminación de Sterlingov:

“El principal problema que tienen es que no hay ni una sola prueba de que alguna vez haya operado Bitcoin Fog. La evidencia que tienen, entre comillas, se basa en este análisis forense de blockchain realmente de mala calidad realizado principalmente [por Chainalysis]”.

La afirmación de Ekeland se reduce entonces a una afirmación sencilla. Sostiene que el software de Chainalysis no es lo suficientemente confiable desde el punto de vista científico como para justificar que sus pruebas sean definitivas ante los tribunales.

Ekeland sostiene que Chainalysis no puede dilucidar su tasa de error ni poseer investigaciones revisadas por pares que refuercen su precisión.

Estas afirmaciones son primordiales, ya que la industria del análisis de blockchain, aún en su relativa infancia, carece de puntos de referencia establecidos para la validación de evidencia.

La confiabilidad forense de la tecnología blockchain es puesta en duda

Sin embargo, si bien la defensa de Sterlingov ha atraído una atención notable, es esencial considerar la historia de Chainalysis y la confianza generalizada que ha acumulado.

La empresa ha obtenido más de 68,6 millones de dólares en contratos de 8 agencias estadounidenses desde 2019. Numerosos procesamientos exitosos han utilizado los datos de Chainalysis.

En este contexto, el desafío actual a su software podría sentar un precedente sobre cómo se perciben y emplean las herramientas de análisis de blockchain en futuros casos legales.

Sin embargo, el argumento central no es el éxito de Chainalysis en el mercado sino la veracidad de sus herramientas. Ekeland impugnó el software y cuestionó la falta de evidencia tangible que vincule a Sterlingov con Bitcoin Fog, como registros del servidor.

Sin evidencia que lo corrobore, el peso del caso depende cada vez más de la confiabilidad de los análisis forenses de blockchain, realizados principalmente por Chainalysis.

Marco Novak

Monterrey (México), 1990. Estudió una licenciatura en comunicación y comenzó trabajando en medios locales de su ciudad, como periódicos, revistas, estaciones de radio o canales de televisión. Tiene un gran interés por la cultura mexicana, incluyendo la música, la comida y la historia. Es un apasionado de los deportes, especialmente del fútbol.