Mediaset España ha reordenado su estructura directiva tras completarse el proceso de fusión transfronteriza por absorción de Grupo Audiovisual Mediaset España Comunicación por la parte de MFE-Mediaforeurope. Según ha informado en un comunicado, Borja Prado va a ser el presidente de la compañía y se va a quedar sin responsabilidades editoriales. De va a depender de forma directa la dirección de Relaciones Institucionales asignada a Mario Rodríguez. Mientras, Alessandro Salem, nuevo consejero encargado del conjunto, va a ser quien decida la línea editorial, según el nuevo organigrama.
Massimo Musolino, consejero encargado de Gestión y Operación, reportará a Salem y va a ser el responsable del día a día. De van a depender las divisiones Económica-Financiera, con Javier Uría al frente; y de Tecnología y Operaciones, con Eugenio Fernández como máximo responsable; y las direcciones de Recursos Humanos, cuya responsabilidad está asignada a Alicia Zamora; y Desarrollo Corporativo, cuyo responsable es Juan Antonio Moreno.
Salem y Musolino fueron escogidos para reemplazar a Paolo Vasile, quien estuvo al frente de la compañía como consejero encargado a lo largo de veinticuatro años. Su pretensión era la de desamparar el cargo en dos mil diecinueve, mas la llegada de la pandemia, que supuso un golpe para el conjunto en concepto de inversión promocional, hizo que prolongara su permanencia. Anunció formalmente su salida en el mes de octubre de dos mil veintidos.
Salem asimismo tiene ahora la responsabilidad directa sobre la Dirección General Corporativa, al frente de la que está Mario Rodríguez; la Dirección de Comunicación y Relaciones Externas, con Sandra Fernández al frente; Publiespaña, con Stefano Sala como presidente y Davide Mondo como consejero delegado; la Dirección General de Contenidos, al frente de la que está Manuel Villanueva; la Divisón de Informativos, cuya responsabilidad está asignada a Juan Pedro Valentín; y la División de Informativos de Telecinco, al frente de la que está Pedro Piqueras.
En dos mil veintidos, el último año en el que Vasile estuvo al mando, el conjunto Mediaset, cuyo primordial accionista es la familia del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, registró un beneficio neto de ciento setenta y ocho millones de euros, algo bajo los ciento ochenta y uno millones del año precedente. La minoración en las ganancias refleja el retroceso de la audiencia de los canales de TV, sobre todo de Telecinco, y una menor facturación promocional.
