Empleados de Inditex en Europa exigen su parte de los beneficios: 'Nuestro esfuerzo impulsa el éxito de la empresa'

Empleados de Inditex en Europa exigen su parte de los beneficios: ‘Nuestro esfuerzo impulsa el éxito de la empresa’

El bullicio habitual del Paseo de Gràcia en Barcelona se ha intensificado este viernes con la llegada de la campaña de descuentos del Black Friday. Entre turistas y locales que abarrotan las tiendas, se produjo una manifestación frente a la emblemática tienda de Zara, ubicada en uno de los cruces más concurridos de la ciudad. Decenas de trabajadores del grupo Inditex, propietario de Zara y otras marcas, se congregaron para exigir que la empresa, liderada por Marta Ortega, comparta sus millonarios beneficios anuales con sus empleados.

Una Iniciativa Pan-Europea

La convocatoria de esta protesta no fue aislada, sino parte de un movimiento que abarca varias ciudades europeas, incluyendo Madrid, Lisboa, París y Bruselas. En total, trece localidades se unieron para hacer escuchar sus demandas. La concentración frente a Zara provocó una curiosa mezcla de reacciones. Mientras algunos clientes se mostraban indiferentes al ruido de los manifestantes, otros se acercaban a informarse sobre la situación que inquietaba a quienes trabajan en la tienda donde acababan de realizar sus compras.

Los empleados estaban cansados de presentar quejas sobre las duras condiciones laborales y los escasos aumentos salariales, incluso frente a beneficios empresariales que alcanzaron cifras sorprendentes: en 2024, Inditex reportó ganancias de 5.866 millones de euros, un 9% más que el año anterior, y repartió un dividendo de 1,68 euros por acción, también un 9% más. Sin embargo, los trabajadores se sienten excluidos de esta prosperidad.

«Karla Castillo, representante de UGT en el centro logístico Plataforma Europa de Inditex en Zaragoza, expone que ‘ya no recibimos el bonus de beneficios que antes de la pandemia sí llegábamos a cobrar’. Este bonus, equivalente al 2% del beneficio total, les proporcionaba entre 500 y 600 euros, que desde entonces ha sido eliminado».

Demandas de un Cambio Real

La naturaleza transversal de la protesta, que involucra a múltiples países, resalta la unidad entre los empleados de Inditex. En 2018, la compañía y los sindicatos formaron un comité de empresa europeo que ahora articula estas concentraciones. Gemma Romero, representante de CC OO en Inditex y empleada desde 2004, subraya: «Hoy no buscamos cerrar tiendas, solo hacer ruido. Pero si las negociaciones no avanzan, volveremos a manifestarnos». Ella trabaja en la misma ubicación donde se lleva a cabo la protesta y comparte la frustración de muchos: «Los beneficios solo benefician a unos pocos, mientras que nosotros enfrentamos una carga laboral excesiva».

Finalmente, en medio de los silbatos y música, trabajadores de otras empresas del sector, como Manolo de Mango, también se unieron a la causa: “Estamos aquí para apoyar, porque lo que sucede en Inditex puede extenderse a nosotros”.

Reflexiones Finales

Este escenario pone de relieve la necesidad de un modelo más justo y humano en el ámbito laboral, donde el reconocimiento y la compensación sean dignos para quienes contribuyen al éxito de la empresa. La voz unificada de estos empleados es un grito por condiciones laborales más humanas en un sector que, a menudo, prioriza las ganancias económicas sobre el bienestar de su fuerza laboral.