Un ejecutivo de Campbell’s Soup Company ha sido suspendido de manera temporal tras presuntas declaraciones despectivas sobre los productos de la compañía, calificándolos como “mierda para gente jodidamente pobre”. Este insólito comentario, que quedó registrado en audio, forma parte de una demanda por despido improcedente interpuesta por un exempleado, según reporta Revista Emprendimiento.
La Demanda y sus Detalles
El demandante, Robert Garza, presentó la queja el pasado jueves en el tribunal de circuito del condado de Wayne, Michigan. Garza, quien se incorporó a la sede de Campbell en Nueva Jersey en septiembre de 2024 como analista de seguridad, alega que fue despedido en enero tras expresar sus preocupaciones sobre los comentarios del vicepresidente de tecnología de la información, Martin Bally.
En una reunión sobre su salario, Garza afirma que Bally lanzó una serie de comentarios cargados de prejuicio, donde, entre otros desaciertos, se refería a uno de los ingredientes de la empresa como “carne bioingeniería”. La demanda sostiene que la charla se convirtió en una diatriba de una hora, en la que Bally desprestigiaba tanto los productos como a los consumidores de Campbell’s, y hacía comentarios racistas hacia empleados de origen indio.
Garza grabó la conversación tras notar que “algo no estaba bien”. En las grabaciones, se escucha a una voz declarar: “Tenemos mierda para los putos pobres” y expresar su desdén hacia los ingredientes utilizados, mencionando: “No quiero comer un trozo de pollo que ha salido de una impresora 3D”.
Impacto en Garza y Reacción de Campbell’s
Después de la reunión, Garza manifestó haber sentido “puro asco”, pero mantuvo la grabación en privado hasta enero, cuando decidió denunciar el comportamiento de Bally a su supervisor, JP Aupperle. Apenas 20 días después de hacer la denuncia, Garza fue despedido, algo que él considera injusto, puesto que no hubo ninguna sanción previa en su contra.
El abogado de Garza, Zachary Runyan, defendió su cliente, argumentando que este actuó al defender a sus compañeros de trabajo. “Fue a hablar con su jefe y planteó que los comentarios de Bally eran inaceptables. La respuesta a su defensa fue ser despedido, lo cual es absurdo”, comentó Runyan.
La demanda no solo alega despido por represalia, sino que también destaca la creación de un ambiente laboral hostil en cuanto a la raza. Garza denuncia que su queja no fue atendida adecuadamente por la empresa ni por el departamento de recursos humanos, lo que lo dejó sin empleo durante diez meses.
Investigación y Respuesta de Campbell’s
Campbell’s ha declarado que está llevando a cabo una investigación sobre las acusaciones y que Bally ha sido suspendido de su cargo. La empresa enfatizó que, de ser ciertos, los comentarios grabados son totalmente inaceptables y no reflejan sus valores ni la cultura corporativa.
Por otro lado, un portavoz de Campbell’s rebutó las afirmaciones sobre el uso de carne bioingenierizada, asegurando: “Usamos 100% pollo real en nuestras sopas. La carne proviene de proveedores aprobados por el Departamento de Agricultura de EE. UU. y cumple con nuestros exigentes estándares de calidad”.
Hasta ahora, Bally no ha emitido declaraciones públicas sobre la demanda, que lo nombra junto a Aupperle y a la empresa como parte de los acusados.
Este episodio refleja la importancia de mantener un ambiente laboral respetuoso, donde se valore la dignidad de todos los empleados y consumidores. La situación continúa en desarrollo, y será interesante observar cómo se resuelve esta compleja disputa.
