Adiós a los sellos de verificación azul a usuarios viejos que han rechazado abonar por Twitter Blue. Después de falsas alarmas, a lo largo de la tarde y noche del jueves, han desaparecido las insignias azules de perfil de miles y miles de personas, incluidas la de conocidos y políticos, como Hillary Clinton, Donald Trump, Bill Gates, y Kim Kardashian, que tenían su personalidad verificada. Y solo figura esa marca azul al lado de los perfiles de quienes han pagado la subscripción. Eso sí, la plataforma no le ha quitado el símbolo a todo el que no paga; parece que Elon Musk ha escogido quiénes podrían proseguir beneficiándose del servicio de forma gratuita. Entre tweets indignados y en broma, se han identificado usuarios insignes a los que no le ha desaparecido, aun quienes declararon claramente que no pagarían por la subscripción.

El escritor de best sellers Stephen King es uno de ellos. Durante la tarde de el día de ayer, aseguró que no se había subscrito, ni tampoco compartido su número, como se asegura su cuenta. Un poco después, Elon Musk le respondió “de nada”, insinuando que mismo estaría pagándole la insignia. También lo sostienen el actor de Star Treck William Shatner y el ídolo de la NBA LeBron James, una de las celebridades más críticas a abonar por Twitter Blue (conforme ha confirmado The Verge, James jamás ha pagado). Eso sí, recibió un email de un empleado de Twitter aseverando “extender una suscripción gratuita de Twitter Blue para su cuenta, @kingjames, en nombre de Elon Musk”.

La retirada de la verificación asimismo afecta a las compañías. Durante la mañana del viernes, ciertos anunciantes en la red social han recibido una comunicación por la parte de la compañía asegurando que, desde hoy, las cuentas “deben contar con la insignia azul o subscribirse al plan de Twitter Blue o de Organizaciones Verificadas para seguir poniendo anuncios en Twitter”. Esta versión para empresas tiene un costo de mil dólares estadounidenses mensuales (unos novecientos diez euros), y cincuenta dólares estadounidenses auxiliares, asimismo mensuales, por cada cuenta afiliada que se añada.

En medio del revuelo de las celebridades y las verificaciones, Twitter por último suprimió las etiquetas de “medio financiado por el gobierno” que había añadido en los perfiles de RTVE y la cadena británica BBC. También de la estadounidense NPR y la canadiense CBC que, a inicios de semana, pausaron su actividad en la plataforma tras la imposición de estas etiquetas, que en un inicio solo se aplicaban a medios propagandísticos de países en los que la libertad de expresión está en cuestión, como la rusa RT o la agencia china Xinhua. Twitter asimismo suprimió la etiqueta de “medios afiliados al estado de China” en las cuentas de Xinhua News, como de los cronistas asociados con publicaciones apoyadas por el Gobierno chino.

Hasta entonces, medios con independencia editorial como la BBC, PBS y NPR estaban exentos de una calificación afín. La etiqueta inicial de Twitter para estas cadenas occidentales fue “financiado por el Gobierno” y después “financiado con fondos públicos”. En la actualidad, muchos medios (como EL PAÍS) cuentan con un sello dorado concedido unilateralmente por la plataforma a los que considera una “cuenta comercial oficial en Organizaciones verificadas de Twitter”.

Twitter Blue tiene un costo en España de siete euros al mes si se opta por un plan anual, y de ocho euros en un plan mensual, siempre y cuando la subscripción se haga desde su web. Aquellos usuarios que deseen contratar el sello azul desde sus dispositivos móviles, Android o iOS, deberán abonar once euros. Y no va a estar libre para todos. Solo las cuentas registradas hace un mínimo de noventa días van a poder acceder a este producto, que se activa por medio de un número de confirmación y el pago.

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