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El pasado miércoles, el club de estudiantes de la UMA Untaught festejó su primer acontecimiento, una mesa redonda sobre telescopios robóticos. Los pupilos se quedaron hasta una hora tras el fin de la mesa, preguntando cuestiones más específicas a los participantes en la mesa y proponiendo trabajos fin de grados conjuntos. Y ese es, justamente, el que aspiran que sea su espíritu: pura proactividad para promover el emprendimiento y compartir conocimientos científico-técnicos.
«Lo bonito es que el autor del propio proyecto te explique desde cero de qué forma va», destaca la presidente del club, Alba Correal. Esta estudiante de 3º del Grado en Ingeniería Electrónica, Robótica y Mecatrónica —de diecinueve años— estima que «hay un inconveniente de comunicación de todo cuanto se hace desde Málaga hasta la gente joven». Y se ha propuesto arreglarlo.
Con un entorno atrevido en el que la gente pueda consultar lo que desee y pupilos activos e interesados en el tema, Untaught organiza cursos breves, talleres, mesas redondas o aun un podcast sobre emprendimiento. Según especifica Correal, ya cuentan con programación cuando menos bimensual hasta mayo… y con comunicantes de primer nivel.
«A la gente le resulta interesante mucho y al mundo entero le semeja súper genial, el nivel de acogida de los pupilos es bueno. Los enseñantes se han volcado con nosotros», valora la presidente de Untaught. Aunque crean equipo poquito a poco, apunta un debe en su casillero: la comunicación.
Su esperanza es que la propia Universidad de Málaga —cuyos proyectos se van a dedicar a visualizar— les pueda echar una mano con ello: «En la UMA tenemos un servicio de publicaciones y patentes impensable, y muy frecuentemente ni los propios enseñantes son siendo conscientes de todo cuanto se cuece acá dentro».
Sin complejos con Silicon Valley
La inquietud por crear una iniciativa de este género, explica Alba Correal, nace de la frustración por no tener a absolutamente nadie con quien charlar de los temas que le interesaban. Tras participar en un hackaton de Link by UMA —la iniciativa universitaria para conectar las facultades con el planeta de la empresa—, Correal recibió un primer premio como perfil destacado… que llevaba anexa la ocasión de acudir a un programa de capacitación en emprendimiento en la Universidad de California, en Berkeley.
«Me cambió la mentalidad ver que allá la gente es considerablemente más proactiva y tienen otra forma de encarar las contrariedades. Yo me preguntaba, ¿esto por qué no se hace en la Escuela de Industriales? ¿Y por qué no lo hacemos los propios pupilos, si sabemos que nos agrada el empredimiento?», recuerda.
Podemos tener los mejores ingenieros del mundo; mas si no tenemos dinero para invertir en nosotros mismos, estamos condenados a irnos fuera
Ella tuvo la ocasión de visitar Silicon Valley, y llegó a la conclusión de que «no tiene demasiada importancia» y «no distan tanto las ideas que se hacen acá y allá». Su diagnóstico es que lo que falta en la Costa del Sol es más financiación y pedagogía en torno a las ideas en marcha.
«Podemos tener los mejores ingenieros del planeta, irnos a Alemania o a Estados Unidos y que nos valoren un montón; mas si al final no tenemos dinero para invertir en nosotros mismos, estamos condenados a irnos fuera. Mucho de mis compañeros piensan en irse, y es una lástima», razona Correal.
Su planteamiento es el contrario: desea quedarse en Málaga y empresas como OWO o Aertec le agradan más que las que encontró en Silicon Valley, más bien centradas en el software. «Siempre nos quejamos de que no podemos, y estamos comiéndole terreno a los americanos«, plantea Correal, que asimismo avisa: «Allí aceptan más peligros, acá somos más retraídos».
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Santander (España), 1985. Después de obtener su licenciatura en Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid, decidió enfocarse en el cine y se matriculó en un programa de posgrado en crítica cinematográfica.
Sin, embargo, su pasión por las criptomonedas le llevó a dedicarse al mundo de las finanzas. Le encanta ver películas en su tiempo libre y es un gran admirador del cine clásico. En cuanto a sus gustos personales, es un gran fanático del fútbol y es seguidor del Real Madrid. Además, ha sido voluntario en varias organizaciones benéficas que trabajan con niños.