Una década después del lanzamiento de la Unión de Mercados de Capitales, la realidad muestra que el progreso ha sido considerablemente menor de lo anticipado. Hoy más que nunca, es vital impulsar este proyecto, ya que la fragmentación actual obstaculiza la competitividad y limita la capacidad para movilizar inversiones hacia las empresas.
Avances y Desafíos en la Unión de Mercados de Capitales
El primer plan de acción, diseñado con un horizonte hasta 2019, logró importantes hitos, como la simplificación y armonización de los folletos de emisión y un repunte en la titulización. Sin embargo, iniciativas clave de carácter político, como la eliminación de barreras fiscales para la inversión transfronteriza y la creación de procesos comunes de insolvencia, siguen sin materializarse. Posteriormente, se lanzó un segundo plan, menos ambicioso, que se centró en la recuperación post-COVID-19 y la transición hacia una economía más verde.
Nueva Estrategia: Unión de Ahorro e Inversión
La integración de los mercados de capitales ha vuelto a ser un tema importante en la agenda política con la nueva estrategia, denominada Unión de Ahorro e Inversión (SIU). Esta propuesta apunta a conectar a ciudadanos y empresas, permitiendo a los primeros aumentar, de forma prudente, la rentabilidad de sus ahorros, mientras que las empresas pueden financiar sus necesidades de inversión.
Presentada el 4 de diciembre, esta estrategia incluye un conjunto de medidas que buscan facilitar la creación de un estatus de Operador de Mercado Panaeuropeo para la negociación de valores y simplificar los procesos transfronterizos para los depositarios centrales de valores. En cuanto a la gestión de activos, se espera que se facilite la entrada de fondos al mercado único, al tiempo que se apoye la innovación a través de tecnologías de registro distribuido.
Regulación y Supervisión: Un Cambio Necesario
Uno de los ejes centrales de estas propuestas es la simplificación de la normativa y la reducción de la discrecionalidad nacional al convertir directivas en reglamentos. Además, se planea centralizar competencias en la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA), que se encargará de supervisar directamente las infraestructuras del mercado y los proveedores de servicios de criptoactivos de importancia significativa.
La necesidad de estas reformas se hace evidente cuando comparamos la capitalización bursátil: en 2024, esta representará el 73% del PIB en la UE, frente a un impresionante 270% en EE. UU. Según la Comisión Europea, la diversidad de requisitos y prácticas está limitando las operaciones transfronterizas y, por ende, las oportunidades de inversión. En Europa coexistirán más de 300 mercados, lo cual complica aún más el panorama.
Un Paso Adelante Hacia un Verdadero Mercado Único de Capitales
El paquete de propuestas presentadas busca simplificar el marco regulador con el objetivo de mejorar el funcionamiento del mercado único de servicios financieros. Esto beneficiará a inversores, empresas y fortalecerá la economía de la Unión Europea. Aunque se trata de un avance significativo, persisten obstáculos importantes que requieren atención inmediata y ambiciosa. Solo así podremos alcanzar un verdadero mercado único de capitales que potencie el crecimiento y la inversión en la región.
(Irene Peña y Patricia Muñoz son profesoras de Afi Global Education.)
