CaixaBank acelera su estrategia de financiación hacia 2026 a través de una notable emisión en libras esterlinas. Este movimiento estratégica coincide con la refinanciación de una emisión anterior de 500 millones de libras, que vence en diciembre de 2026 y cuya amortización anticipada se programó para este año. Lo más impresionante es que la demanda por estos bonos superó con creces las expectativas, alcanzando tres veces el monto finalmente colocado. La nueva emisión ofrecerá un cupón del 4,75%, significativamente más alto que el 1,5% de los bonos que reemplaza.
Explotando Oportunidades en el Mercado
Aprovechando las condiciones favorables del mercado y el optimismo de los inversores tras las discusiones sobre el presupuesto británico, CaixaBank ha emitido un bono sénior no preferente por un total de 500 millones de libras. Esta emisión tiene un plazo de seis años y permite una opción de amortización anticipada a partir del quinto año. Se trata de la octava emisión del banco en 2025 y su primera en la moneda británica este año.
Este lanzamiento marca el retorno de CaixaBank al mercado del Reino Unido, tras una emisión Tier 2 en enero de 2023. Según la entidad, «la colocación se realiza en la misma fecha de amortización del primer bono emitido en libras esterlinas, que se ha concretado hoy”.
Diversificación y Posicionamiento Financiero
Actualmente, CaixaBank posee tres emisiones de deuda en libras esterlinas. Esto incluye dos emisiones de bonos y una de bonos subordinados Tier 2. “La reciente emisión, junto con un triple tramo de deuda sénior no preferente en dólares (3.000 millones) de junio, enriquece la base inversora del banco”, indicó la entidad en un comunicado. Notablemente, el 34% del plan de financiación de 2025 ya se ha ejecutado en monedas que no son euros.
La respuesta del mercado ha sido extraordinaria, con una demanda que sobrepasó los 1.500 millones de libras, lo que permitió fijar el precio en 98 puntos básicos por debajo del bono del Tesoro británico, 12 puntos menos de lo proyectado inicialmente. El cupón definitivo se estableció en el 4,75%.
Esta emisión se suma a esfuerzos anteriores de CaixaBank durante el año, donde ya había realizado una operación de 1.000 millones de euros en enero y un triple tramo en dólares por un total de 3.000 millones en julio. Todo esto se alinea con los planes de financiación mayorista delineados en su estrategia para 2025-2027.
CaixaBank continúa fortaleciendo su estructura de pasivos, lo cual es esencial en caso de una hipotética intervención. Este movimiento reafirma su compromiso de aumentar la protección para sus acreedores senior y sus depositantes.
Las entidades que facilitaron esta colocación incluyen a CaixaBank, Jefferies, Lloyds, NatWest y Nomura, mostrando una colaboración sólida entre importantes actores del mercado financiero.
