La empresa pública L’Energètica ha nacido con un ambicioso objetivo: lograr que la Generalitat de Cataluña sea carbono neutral para 2040. Desde su creación en 2023, su misión se ha centrado en instalar paneles solares en los 1.400 tejados de edificios que albergan a la administración catalana, buscando satisfacer su demanda energética y la de las áreas circundantes. Sin embargo, este esfuerzo resulta insuficiente. Para alcanzar su meta de 1.000 megavatios (MW) de potencia, L’Energètica está considerando también el aprovechamiento de terrenos, cubiertas privadas, pérgolas, plazas y hasta energías eólica e hidráulica.
Innovación Energética en Cataluña
El director general de L’Energètica, Daniel Pérez, comenta que la estrategia se basa en crear una verdadera «red neuronal» de energía. “Nuestro enfoque es maximizar el uso de las cubiertas para generar energía, de la cual los excedentes se canalizan para abastecer las infraestructuras públicas en un radio de dos kilómetros para el autoconsumo”, detalla. Mientras que las primeras instalaciones se enfocaron en el autoconsumo individual, ahora se están orientando hacia el colectivo.
Un ejemplo de esta iniciativa se puede observar en Rubí, Barcelona. En el techo del Instituto La Serreta, se ha instalado una planta de 128 kilovatios hora pico (kWp) que no solo da servicio a este instituto, sino también a centros de atención primaria y otras instalaciones importantes de la localidad. Hasta la fecha, se han activado 10 proyectos similares, y la meta para 2025 es cerrar con 140 instalaciones que generen 30 MW. La proyección para 2030 apunta a alcanzar los 200 MW, gracias a una inversión aproximada de 170 millones de euros, combinando fondos Feder y financiación pública.
Desafíos y Oportunidades Energéticas
A pesar del potencial, el uso de energías renovables en entornos urbanos es aún limitado en España, especialmente en el sector público. Francisco Martín, investigador del ITT de la Universidad Pontificia Comillas, señala que la edificación nueva presenta menos desafíos, ya que se puede diseñar desde el inicio con eficiencia energética en mente. En contraste, las estructuras antiguas enfrentan limitaciones como falta de espacio y orientación desfavorable. Esto, sumado a la necesidad de rehabilitación, incrementa los costos de los proyectos.
Para Martín, la combinación de energía fotovoltaica, aerotermia y almacenamiento es clave en entornos urbanos. “Es compacta, eficiente y adaptable”, añade. El coste de una instalación estándar de 3 kWp oscila entre 4.000 y 5.500 euros, mientras que una de 5 kWp puede costar entre 6.000 y 8.000 euros. Si se añade almacenamiento, el costo incrementa en aproximadamente 3.000 euros.
Avances en Energías Renovables
María Manzano, técnica de la Fundación Renovables, destaca que el despegue notable de la energía solar térmica se remonta a 2010, cuando se incluyó su implementación en el Código Técnico de la Edificación. La eliminación del impuesto al sol en 2018 provocó un aumento significativo en el autoconsumo fotovoltaico, acumulando en la actualidad 8.137 MW según datos de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF).
Con miras hacia el futuro, la normativa europea establece que todos los edificios deben ser de cero emisiones para 2030, con un enfoque en la descarbonización total para 2050. Actualmente, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) reporta una potencia instalada total de 6.107 kWp en 133 edificios públicos, generando 21.512 KWh anuales, gracias a una inversión cercana a 30 millones de euros.
La Energía Eólica y Biomasa: Un Camino por Recorrer
La energía eólica, en su modalidad de minieólica con aerogeneradores de eje vertical, sigue siendo escasa. Alberto Ramos, profesor de la ETSI Minas y Energía de la Universidad Politécnica de Madrid, destaca que su uso se ha visto limitado por la falta de regulación y la sobrevaloración del recurso. A pesar de algunas iniciativas exitosas en otros países, en España la minieólica no ha logrado un avance significativo.
En el ámbito de la biomasa, su desarrollo ha sido mayor en entornos rurales. Sin embargo, los proyectos de redes de calor y frío aún enfrentan retos en entornos urbanos. Por su parte, el municipio de Bilbao ha comenzado un innovador proyecto que combina geotermia, aerotermia e hidrotermia, teniendo como objetivo sustituir los combustibles fósiles en su sistema de calefacción y refrigeración en un plazo de 25 años.
Obstáculos en el Camino hacia la Sostenibilidad
A pesar de los avances, Pedro Ruiz, presidente de Mitsubishi Electric España, advierte que la tasa de rehabilitación energética en el país sigue siendo inferior al 1% anual, lo que retrasa el cumplimiento de los objetivos de neutralidad climática. Además del alto coste inicial de los proyectos, se suman factores como la falta de incentivos fiscales y la escasa concienciación sobre los beneficios de la rehabilitación energética.
Las comunidades autónomas han implementado programas de ayuda que cubren entre el 40% y el 70% de la inversión, aunque los trámites suelen ser engorrosos. Recientemente, el IDAE respaldó la creación de 27 nuevas comunidades energéticas, canalizando 35,6 millones de euros en ayudas para que cerca de 100.000 beneficiarios accedan a energía renovable.
La Recarga de Vehículos Eléctricos: Un Futuro Sostenible
Finalmente, Arturo Pérez de Lucía, director general de Aedive, subraya la importancia de desarrollar la recarga en corriente alterna, una modalidad que permite cargar vehículos de forma más económica y accesible. Pese a su lenta expansión, su potencial para mejorar la eficiencia y ahorro es innegable, y se espera que se combine con la energía solar y aerotermia para transformar la movilidad eléctrica en las ciudades.
L’Energètica y otras iniciativas en Cataluña están sentando las bases para un futuro más sostenible, pero el camino hacia la completa integración de energías renovables en el día a día de los ciudadanos aún presenta numerosos desafíos.
