La Sociedad Española para la Transformación Tecnológica (SETT) se erige como un pilar fundamental en la financiación e inversión en tecnologías avanzadas que abarcan áreas clave como la transformación digital, telecomunicaciones, microelectrónica y más. Su misión es clara: convertir a España en un líder en el ámbito de las tecnologías disruptivas. A través de un modelo de gestión innovador, la SETT no solo actúa como una entidad gestora de inversiones, sino que también se convierte en un promotor activo de oportunidades en el ecosistema tecnológico.
En esta ocasión, tenemos el privilegio de hablar con José Marino García, Director Ejecutivo de Capitalización de la SETT. Con una sólida trayectoria en el gobierno y la gestión económica, García nos ofrece una perspectiva valiosa sobre el papel de la entidad en la transformación del panorama tecnológico español.
La SETT: Un motor para la transformación
La SETT es más que una simple herramienta; es un factor crítico para revitalizar el sector tecnológico en España. Su enfoque activo permite que empresas innovadoras y con talento no se queden sin financiación. Gracias a su asociación con el sector privado, la SETT se asegura de que las inversiones en startups disruptivas fluyan con agilidad, contribuyendo así al crecimiento de un sector que es esencial para el futuro del país.
Una necesidad justificada
La creación de la SETT responde a la falta de un banco especializado en tecnologías digitales dentro del ámbito público. Con la movilización de cerca de 16.000 millones de euros provenientes de diferentes fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), la SETT se dispone a transformar la economía española mediante la incorporación de tecnología digital en varios sectores. Este cambio de paradigma marca un nuevo rumbo en la administración pública, orientándose hacia una acción proactiva en vez de meramente regulatoria.
Revolucionando el modelo estatal
Tradicionalmente, el Estado se centraba en regular, generar entornos adecuados para inversiones y gestionar riesgos. Sin embargo, con la SETT, se añade una faceta proactiva como co-inversor. Esto implica que el gobierno no solo prepara el terreno, sino que también se compromete a participar, aunque sin superar el 49% del capital de las empresas. Este enfoque ha sido recibido con entusiasmo, pues permite establecer un entorno donde la innovación puede prosperar sin que el Estado interrumpa la toma de decisiones industriales.
La importancia de ser coinversores
El papel de la SETT como coinversor resulta crucial para las startups que necesitan financiación para escalar sus proyectos. La entidad apuesta por la confianza en el talento y las ideas locales, convirtiéndose en el aliado que motiva a otros inversores. La SETT asegura que ninguna idea prometedora se quede sin la oportunidad de realizarse, mitigando así los riesgos y movilizando un ecosistema robusto que respalda la innovación.
Un futuro con potencial
Las condiciones para que España se posicione como un líder en las inversiones en tecnologías disruptivas nunca han sido tan favorables. Con un entorno que ofrece diversos recursos para la ejecución de proyectos, la SETT ya está viendo resultados tangibles en varios polos de innovación a lo largo del país. Las iniciativas como Sparc en Galicia, Quantix en Murcia y muchos otros son testimonio del impacto que se puede lograr a corto tiempo.
Sinergias e integración
La SETT se encuentra profundamente integrada con múltiples actores en el ecosistema, desde la Unión Europea hasta el ámbito académico. Proyectos significativos, como el Centro de Desarrollo e Innovación en Microelectrónica en Málaga, demuestran cómo la colaboración puede potenciar el avance en áreas críticas de la tecnología. Además, iniciativas como las «Cátedras Chip» estimulan la formación de profesionales, alineando la educación superior con las necesidades del mercado.
Mirando hacia el futuro
Con el fondo Next Tech, la SETT está configurando una hoja de ruta a largo plazo con el objetivo de financiar y empoderar a más startups, promoviendo la igualdad de género y fomentando un entorno más inclusivo. Con resultados ya visibles en el corto plazo, la entidad se posiciona como un líder en la transformación tecnológica de España, sentando las bases para un futuro más iluminado y sostenible.
En este camino hacia la soberanía tecnológica europea, la SETT se compromete a seguir apoyando la innovación y fomentar un ecosistema de recursos, formación y financiación que permita a España brillar en el ámbito tecnológico internacional.
