Ilustración de Inteligencia Artificial en móviles

La llegada de los nuevos smartphones de gama alta ha traído consigo una oleada de funciones basadas en inteligencia artificial, como la generación de imágenes, la edición de textos o la creación de vídeos. Este avance plantea una disyuntiva en la industria: ¿es mejor procesar estas tareas en la nube o en el dispositivo?

El caso de Samsung y sus últimos smartphones plegables, los Galaxy Z Fold 6 y Flip 6, ejemplifica esta situación. La firma coreana ha desarrollado nuevas funciones de IA, algunas se ejecutan en el propio dispositivo y otras requieren conexión a la nube. Esta dualidad plantea interrogantes sobre el futuro de estas tecnologías y su coste para los usuarios.

Samsung ha anunciado que las funciones de IA que se procesen en la nube serán gratuitas hasta finales de 2025, reconociendo así la incertidumbre en torno a este tema. El procesamiento en la nube conlleva un alto coste energético y económico, como lo demuestra un estudio de SemiAnalysis que señala que una consulta a ChatGPT puede costar unos 36 céntimos de dólar.

La tendencia de la industria apunta hacia un procesamiento local de la IA en los dispositivos, utilizando el CPU, GPU y NPU para funciones de inteligencia artificial. Esto garantiza una mayor privacidad al usuario y la posibilidad de utilizar la IA sin conexión a Internet. Sin embargo, el procesamiento en la nube ofrece una mayor precisión en tareas complejas como la generación de imágenes o textos.

Para Samsung, la decisión de procesar localmente o en la nube se basa en el rendimiento y la privacidad. Las tareas que requieren rapidez y privacidad se ejecutan en el dispositivo, mientras que aquellas que demandan mayor potencia computacional se envían a la nube. Este enfoque híbrido entre procesamiento local y en la nube parece ser la dirección que seguirán los fabricantes de smartphones en el futuro.

El aumento del procesamiento de IA en la nube plantea desafíos en términos de consumo energético, con compañías como Google y Microsoft reportando aumentos significativos en su consumo eléctrico. La búsqueda de un equilibrio entre eficiencia, rendimiento y sostenibilidad será clave en el desarrollo de las tecnologías de inteligencia artificial en los dispositivos móviles.