Google se enfrenta a desafíos políticos con su nueva inteligencia artificial, Gemini. Esta IA ha generado controversia al no proporcionar respuestas satisfactorias a preguntas relacionadas con figuras políticas como Carles Puigdemont, Donald Trump o Vladimir Putin.

Gemini, presentado como el «mejor acceso directo a la IA de Google», ha sido criticado por dar respuestas genéricas o rechazar directamente preguntas sobre ciertos políticos. Usuarios en EE.UU. han notado sesgos en las respuestas de Gemini, especialmente en la representación de imágenes de personas, lo que plantea interrogantes sobre el entrenamiento y la influencia humana en este modelo de IA.

IA Google

La falta de claridad en las respuestas de Gemini ha llevado al CEO de Google, Sundar Pichai, a reconocer públicamente los desafíos que enfrenta la empresa en este sentido y la necesidad de abordar los problemas de parcialidad y falta de precisión.

Es relevante destacar que las respuestas de Gemini varían según el político consultado. Mientras que algunos como Pedro Sánchez o Yolanda Díaz reciben respuestas detalladas, otros como Carles Puigdemont generan respuestas evasivas o genéricas.

Catalanes y Gemini

La polémica en torno a Gemini refleja los desafíos éticos y técnicos que enfrentan las IA en la actualidad. A medida que la inteligencia artificial evoluciona, es fundamental abordar de manera cuidadosa y transparente la manera en que estas tecnologías responden a preguntas complejas y sensibles.

Mao Zedong y Gemini

En conclusión, la polémica en torno a Gemini destaca la importancia de la transparencia, la imparcialidad y la precisión en el desarrollo y la implementación de tecnologías de IA. Google y otras empresas deben abordar estos desafíos para garantizar que sus IA brinden respuestas acertadas y éticamente responsables en el futuro.