Diego Hidalgo, sociólogo y mago, ha dedicado su vida a combatir el poder de las grandes empresas tecnológicas y su influencia en nuestras vidas. En una entrevista reciente, Hidalgo plantea la necesidad de tomar medidas drásticas para proteger a los adolescentes de los peligros de la adicción a los dispositivos móviles.
La influencia de la tecnología en nuestras vidas
Hidalgo sostiene que la tecnología digital nos anestesia, limita nuestra libertad y nos simplifica como especie. En su libro «Retomar el control», señala que empresas como Google condicionan nuestras decisiones a través de la explotación masiva de datos, lo que nos vuelve más manipulables a la hora de consumir productos y servicios.
Una de las propuestas más controvertidas de Hidalgo es la prohibición de la venta de móviles a los adolescentes, equiparándola a la regulación del tabaco o el alcohol. Para él, esta medida empoderaría a los padres y protegería a los jóvenes de los peligros de una adicción socialmente aceptada.
El impacto en la salud mental de los adolescentes
Hidalgo alerta sobre el impacto negativo que las redes sociales y el uso excesivo de pantallas tienen en la salud mental de los adolescentes, especialmente en las niñas, donde las tasas de ansiedad y depresión han aumentado significativamente en los últimos años.
Como padre de tres hijos, Hidalgo promueve una relación sana y controlada con la tecnología en su hogar, limitando el uso de pantallas para fomentar la libertad y la autonomía de sus hijos.
Una visión crítica pero esperanzadora
A pesar de su postura crítica hacia la tecnología, Hidalgo no se considera un tecnófobo, sino más bien un tecnocrítico. Reconoce el potencial positivo de la tecnología, pero aboga por un buen uso que preserve la libertad individual y la interacción humana profunda.
En resumen, Diego Hidalgo nos invita a reflexionar sobre el impacto de la tecnología en nuestras vidas y a tomar medidas para proteger a las nuevas generaciones de los peligros de una adicción socialmente aceptada. Su mensaje nos recuerda la importancia de mantener un equilibrio saludable entre el mundo digital y el mundo real.
Santander (España), 1985. Después de obtener su licenciatura en Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid, decidió enfocarse en el cine y se matriculó en un programa de posgrado en crítica cinematográfica.
Sin, embargo, su pasión por las criptomonedas le llevó a dedicarse al mundo de las finanzas. Le encanta ver películas en su tiempo libre y es un gran admirador del cine clásico. En cuanto a sus gustos personales, es un gran fanático del fútbol y es seguidor del Real Madrid. Además, ha sido voluntario en varias organizaciones benéficas que trabajan con niños.