En Latinoamérica existe el constante desafío de acercar la salud a los pacientes, es decir, mejorar su atención en términos de calidad y seguridad, y lograr que sea accesible para todos. En países de la región, como México o Chile -que cuentan con un sistema de salud complejo y diverso-, existen factores comunes que dificultan la prestación de una atención médica adecuada.

Uno de ellos es la escasez y poca eficiencia tanto de hospitales, como de clínicas, donde muchas veces no cuentan con sistemas que les permitan atender la demanda creciente de atención médica, lo que lleva a largas esperas y a una calidad de atención comprometida. Asimismo, existe una falta de acceso a servicios básicos de salud de calidad por las diversas barreras que existen, desde las geográficas hasta las económicas, así como también, muchos pacientes no cuentan con información clara sobre los costos de los tratamientos médicos, generando preocupaciones financieras significativas y un estrés adicional a una ya difícil situación de salud.

Frente a este escenario, la tecnología y la Inteligencia Artificial se han transformado en un buen aliado para ir avanzando en la resolución de estos y otros temas sanitarios, y para lograr este avance, se han creado herramientas tecnológicas que permiten agilizar y generar un impacto positivo en los procesos clínicos y administrativos, derivar urgencias y especialistas de manera remota o incluso gestionar filas de pacientes y confirmar sus citas de forma 100% digital.

El uso de tecnología e IA puede ser importante para ofrecer más claridad, transparencia, seguridad y rapidez respecto a los costos de los presupuestos, mejorando con ello la comunicación entre los pacientes y los centros de salud, permitiéndoles tomar decisiones informadas.

Esta automatización de los procesos tiene beneficios tanto para los pacientes, como para los centros de salud. Por un lado, permite ahorrar el tiempo de las personas, y organizar mejor su jornada diaria. Lo anterior lo hemos visto reflejado en varios centros médicos, como por ejemplo, en el Hospital Regional de Rancagua en Chile, donde quienes agendan previamente su retiro de medicamentos en este centro médico, demoran 13 minutos en vez de 44 minutos en obtener su remedio.

Por otro lado, a los centros médicos les permite reducir tanto el estrés de sus operaciones, como las inasistencias y los tiempos de espera, permitiéndoles atender a más personas en un menor periodo. A modo de ejemplo, en México, la Red de Laboratorios Grupo Río Guadalajara, gracias a la confirmación de citas, lograron
una asistencia un 39% mayor
que antes de la implementación, y un ausentismo reducido, marcando en ellos un hito en la optimización de procesos y la fidelización de pacientes.

La adopción de soluciones digitales puede optimizar tanto la gestión de recursos sanitarios, como la comunicación con las personas, siendo un beneficio para todos.

Finalmente, el uso de tecnología e IA puede ser importante para ofrecer más claridad, transparencia, seguridad y rapidez respecto a los costos de los presupuestos, mejorando con ello la comunicación entre los pacientes y los centros de salud, permitiéndoles tomar decisiones informadas.

Así, en medio de los desafíos de la atención médica en Latinoamérica, la tecnología se alza como un agente de cambio. La adopción de soluciones digitales puede optimizar tanto la gestión de recursos sanitarios, como la comunicación con las personas, siendo un beneficio para todos, ya que permite mejorar cada etapa del viaje de atención del paciente y transformarla en una experiencia única.