los planes de 3 start-ups de impacto para dos mil veintitres – Ecosistema emprendedor de Latinoamérica

Según el Informe Mundial de Emprendimiento GEM dos mil veintidos, el sesenta y cuatro% de los emprendedores en América Latina consideran la sostenibilidad social y medioambiental como un factor clave en sus modelos de negocio.

En el planeta empresarial actual, las start-ups están retando las reglas establecidas al nacer con un enfoque claro en la diversidad. Estas start-ups no solo procuran crear y conseguir ganancias, sino asimismo se esmeran por crear un impacto social positivo y fomentar la igualdad de oportunidades.

Según el Informe Mundial de Emprendimiento GEM dos mil veintidos, el sesenta y cuatro% de los emprendedores en América Latina consideran la sostenibilidad social y medioambiental como un factor clave en sus modelos de negocio. Y es que estos factores además de esto tienen impacto en el desempeño financiero: un reporte de Boston Consulting Group, revela que las start-ups con equipos directivos distintos tienen un veinticinco% más de probabilidades de tener un desempeño financiero superior al promedio de su industria.

No Pausa y su cruzada #Hablemosdemenopausia

Fue en dos mil dieciocho cuando Milagros Kirpach, cofounder y CEO de No Pausa, creó una red informativa multiplataforma que procuraba visibilizar la menopausia. Por ese entonces, la asociada de Kirpach había estado en torno a un par de años recorriendo profesionales de la salud de diferentes especialidades, con cuando menos 3 diagnósticos equivocados en el camino y con lo que hoy saben que son síntomas de la menopausia, impactando en su calidad de vida, su vínculo de pareja y su espacio de trabajo.

Hoy, la organización No Pausa, y mediante una plataforma, deja a las mujeres tomar el control de la menopausia con diagnóstico, información, acompañamiento médico de especialidad y comunidad de pares. «Por los malos diagnósticos, hoy una mujer en Latam, gasta en torno a US$ 1 mil al año en fármacos que no solventan sus síntomas y que tampoco funcionan», especifica Kirpach.

La start-up consiguió validaciones del BID y reconocimientos de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, como asimismo de Institutos Internacionales de la Mujer como InMujeres en Uruguay. «Todos esos reconocimientos y sellos te dan verosimilitud tanto sea para el negocio B2C para el B2B», destaca Kirpach.

Si se trata del negocio B2C, hoy tienen una comunidad activa de ciento setenta mujeres en lationamérica mas, en término de producto, lanzaron hace 4 meses la primera una parte de la plataforma «MenoCheck», un test de autodiagnóstico automatizado por el que ya pasaron más de mil quinientos clientes del servicio.

En B2B2C, esa herramienta fue adquirida por dos compañias para el uso de sus colaboradoras; y en una de ellas cuentan con más de uno con cuatrocientos mujeres mayores a cuarenta y cinco años en sus equipos. A nivel mercados, dan sus primeros pasos en Argentina y Uruguay. «Es probable que haya una intermediación por Chile o Colombia (en dependencia de fondos a los que aplicamos) ya antes de entrar en México y llegar al mercado latino en Estados Unidos», aclara Kirpach.

Guayerd: educación para la inclusión

Guayerd es una edtech argentina que forma talento de contextos frágiles en tecnología, poniendo foco en fortalecer su empleabilidad desde el ofecimiento de experiencias educativas mediante una metodología de triple soporte; donde forman, acompañan e introducen laboralmente talento con potencial.

«Guayerd nace como una compañía de impacto social en dos mil diecinueve, mas la idea se fue formando ya antes, en una busca personal y profesional de propósito. Estamos enfocados en solucionar un inconveniente de gran extensión en Argentina y Latinoamérica: la creciente vulnerabilidad socioeconómica», comenta Jean del Pino, cofounder y CEO de Guayerd.

Según una investigación de Page Group, en Latinoamérica, las compañías no consiguen cubrir 1 de cada dos situaciones que precisan en papeles de tecnología, y es por eso que las compañías son partners esenciales para Guayerd; son estas las que invierten en formar su porvenir talento, asegurándolo de forma estratégica para impulsar su transformación tecnológica o prestar servicios a sus clientes del servicio. 

El desarrollo de Guayerd está planeado con foco en la consolidación regional. En el último programa de capacitación tuvieron participantes de 9 países de Latinoamérica. «Nuestro objetivo es desarrollar más programas de capacitación en papeles de tecnología de alta demanda con alcance regional, estimando que la vulnerabilidad social y económica es un inconveniente trasversal en Latinoamérica», señala del Pino.

Para el año próximo, el foco está puesto en Argentina, Chile, Colombia, México y Uruguay, con la meta de producir un mayor alcance del impacto de la start-up.

Con la necesidad de apresurar la Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) en las organizaciones, Jorgelina Albano, Founder y CEO de Humanin Lab trabaja a fin de que, verdaderamente, se genere un impacto social. «Las organizaciones son un motor de cambio social y si no pueden agregar en su ADN cultural a la DEI esta no va a ser sostenible», acentúa Alabano y añade: «Para conseguirlo, hay que producir patentiza de los cortes tácitos en las corporaciones y cuáles son los drivers de la cultura que hay que ajustar a fin de que la DEI sea una parte del ADN de la organización».

Humanin Lab produce un doble impacto. Por un lado, en las personas provoca la patentiza del corte y de de qué forma cada uno de ellos percibe la cultura de la organización. «Muchas personas que  pasaron por la experiencia creían que, por servirnos de un ejemplo, eran pro mujer en la alta dirección y se dieron cuenta que aún tenían muchos cortes por transformar», mantiene Alabano y aclara que esta tendencia sucede en compañías en las se tienen CEOs mujeres e inclusive, en más de treinta% en la alta dirección. Por otro lado, procuran asistir a que haya auténtica «meritocracia» desde «limpiar» cortes tácitos, y que las personas se sientan protagonistas del cambio cultural pues las encara a de qué forma perciben la cultura de su organización con respecto a mismo conjunto de evaluación.

Este año, desde Humanin Lab están enfocados en efectuar partnerships y en cumplir con los objetivos de venta que se han propuesto en los próximos doce meses. «Estimamos vender unos cincuenta contratos en este primer año al que llamamos de Instalación. Esos nos significaría entre US$ trescientos y US$ cuatrocientos mil de ingresos», especifica Alabano. Además, se hallan en la busca de capital para proseguir con el desarrollo de la aplicación.