El recorrido de una startup es un proceso en constante evolución que abarca diversas etapas que reflejan su crecimiento y desarrollo. A continuación, te presentamos una guía para comprender sus fases y características principales.
Desde sus inicios en la fase de presemilla hasta una posible etapa de unicornio – con una valoración de más de 1 000 000 millones -, las empresas emergentes experimentan un emocionante viaje, una verdadera montaña rusa en la que el éxito y el fracaso están muy próximos.
A continuación detallamos las principales características de cada una de las fases de una startup.
1- Fase de presemilla (‘Pre-Seed’)
Durante esta etapa inicial, el emprendedor comienza a dar forma a su idea, identificando problemas en el mercado que su producto o servicio podría resolver. Generalmente, se crea un Producto Mínimo Viable (MVP) para probar su viabilidad y determinar si es factible avanzar.
La financiación suele provenir de los fundadores, amigos y familiares. Los costos se mantienen bajos mientras la startup intenta despegar.
2- Fase de semilla (‘Seed’)
En esta fase, el modelo de negocio se ha definido y el producto está listo para su lanzamiento. La startup se enfoca en el marketing y la captación de clientes.
Los inversores profesionales, incluidos los business angels y las plataformas de equity crowdfunding, comienzan a aportar fondos, ya que se necesita financiamiento para expandirse y crecer.
3- Etapa temprana (‘Early Stage’)
Aquí es donde la startup comienza a adquirir clientes y métricas de resultados. Analizar estos datos es clave para ajustar la estrategia y mejorar el producto con el fin de obtener mejores resultados.
Es posible que en este momento sea necesario pivotar de acuerdo con las señales que el mercado está enviando. La financiación se destina a aumentar la escala y el equipo de la startup.
Los business angels y los fondos de capital riesgo se convierten en fuentes importantes de financiamiento en esta etapa.
4- Fase de crecimiento (‘Growth’)
Aquí es donde la startup experimenta un crecimiento significativo en sus usuarios, ingresos y operaciones. Se enfoca en la expansión del mercado y en aumentar su participación en el mismo. Puede buscar nuevos segmentos de usuarios o geografías para continuar creciendo.
Las rondas de financiamiento en esta etapa suelen implicar a inversores institucionales y fondos de capital riesgo que pueden proporcionar una mayor inversión para la expansión necesaria en este momento.
5- Fase de ‘Exit’ o Desinversión
En esta última etapa, la startup alcanza un punto de madurez y se toman decisiones importantes sobre su futuro. Se pueden considerar diferentes opciones de ‘exit’, como la venta de la empresa a un comprador estratégico, una fusión con otra empresa o una Oferta Pública Inicial (OPV) para cotizar en bolsa. En esta etapa, los inversores que han apoyado a la startup a lo largo de su trayecto pueden obtener retornos significativos.
Cabe destacar que no todas las startups atraviesan todas estas fases y la duración y el éxito de cada fase pueden variar en función de varios factores, como la industria, el mercado y la estrategia de la startup.
Algunas startups pueden no superar ciertas etapas si no logran validar su modelo de negocio o enfrentan dificultades insuperables en el camino. Por otro lado, algunas evolucionan de manera única y pueden no seguir exactamente este camino, pero estas fases proporcionan una idea general para comprender cómo evolucionan a lo largo de su ciclo de vida.