La historia es un fenómeno pendular, y la economía asimismo. Si en dos mil ocho, la enorme crisis económica en la que se sumergieron numerosos países comenzaba con la intervención del estado de uno de los bancos más esenciales del planeta, en Estados Unidos, ahora la situación es afín mas se ha centrado en un banco dedicado, sobre todo, a start-ups. Y es que el Silicon Valley Bank ha sido intervenido por la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC por sus iniciales en inglés) debido a las dudas sobre su liquidez y solvencia, lo que ha provocado el miedo a una posible crisis económica mundial como la que vivimos desde dos mil ocho.

El anuncio de esta resolución tuvo lugar el pasado viernes, mas todo empezó a fallar el pasado miércoles, cuando el Silicon Valley Bank anunció que había vendido un montón de valores con pérdidas y que vendería dos mil doscientos cincuenta millones de dólares estadounidenses en nuevas acciones para reforzar su cómputo. Esto provocó el pavor entre las firmas clave de capital de peligro, quienes aparentemente recomendaron a las compañías que retiraran su dinero del banco.

Al día después, el jueves, las acciones de la compañía se cayeron, provocando un efecto dominó ya que otros bancos se vieron arrastrados. 

Ya el viernes, las acciones de este banco se detuvieron y se abandonó los sacrificios para colectar capital de forma rápida o hallar un comprador. Otras acciones bancarias asimismo se detuvieron provisionalmente el viernes, incluidas First Republic, PacWest Bancorpo y Signature Bank.

El organismo de control estadounidense decidió intervenir el viernes, mas lo hizo de una forma infrecuente, ya que generalmente acostumbran a aguardar a que el mercado haya cerrado para intervenir.

El director de Better Markets, Dennis M. Kelleher, escribió en declaraciones recogidas por CNN que “la condición de Silicon Valley Bank se estropeó tan veloz que no pudo perdurar ni 5 horas más”, agregando que “esto se debe a que sus depositantes estaban retirando su dinero tan veloz que el banco se declaró insolvente y un cierre intradiario era ineludible debido a una corrida bancaria clásica”.

El declive de este banco se debe, en parte, a las violentas subidas de géneros de interés de la Reserva Federal a lo largo del año pasado. 

Las tasas más altas afectaron sobre todo a la tecnología, minando el valor de las acciones tecnológicas y complicando la colecta de fondos, lo que provocó que muchas firmas tecnológicas retiraran sus depósitos en el banco de Silicon Valley para financiar sus operaciones. Esto provocó que Silicon Valley Bank tuviese que buscar formas nuevas para poder cumplir con los retiros de sus clientes del servicio.

Para financiar estos reembolsos, el banco vendió el miércoles una cartera de bonos de veintiuno millones de dólares estadounidenses, que consiste eminentemente en bonos del Tesoro de Estados Unidos. La cartera le daba un promedio de uno con setenta y nueve por ciento, muy bajo el desempeño actual del Tesoro a diez años de cerca de tres con nueve por ciento. Esto forzó al banco a reconocer una pérdida de mil ochocientos millones de dólares estadounidenses, que precisaba cubrir a través de un incremento de capital.

Wall Ademeyo, subsecretario del Tesoro de Estados Unidos, llamó a la calma diciendo que “los federales prestan atención a esta corporación financiera en particular y cuando pensamos en el sistema de finanzas generalmente, tenemos mucha confianza en la capacidad y la resistencia del sistema”.

Debido a la alarma que se ha creado, la Reserva Federal de Estados Unidos termina de anunciar en un comunicado conjunto con el Departamento de Estado de Estados Unidos y la Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC), agencia gubernativo encargada de la intervención del Silicon Valley BAnk, un plan a fin de que todos y cada uno de los clientes del servicio del Silicon Valley Bank recobren sus depósitos, lo que supone una resolución sin precedentes desde la crisis del dos mil ocho. Este organismo asimismo ha informado de que va a crear un instrumento de urgencia apoyado por una garantía de veinticinco millones de dólares estadounidenses al que van a poder asistir otros bancos con inconvenientes. Por tanto, todos y cada uno de los clientes del servicio de este banco van a estar cubiertos y asegurados.

Y es que esta ruina ya tiene sus consecuencias. En Reino Unido, el HSBC, en coordinación con el gobierno británico, ha dicho que comprarán la filial británica de Silicon Valley Bank.

Esta situación, considerada como una de las mayores quiebras bancarias desde el dos mil ocho y una de las más esenciales en la historia de Estados Unidos, se trasladó a los mercados de valores de Europa, que han visto las consecuencias. De hecho, en España el Ibex treinta y cinco padeció una de las caídas más fuertes de los últimos un par de meses. Similares situaciones vivieron en Londres, París, Milán o Frankfurt donde sus primordiales bancos padeciendo caídas esenciales. 

 

Marco Novak

Monterrey (México), 1990. Estudió una licenciatura en comunicación y comenzó trabajando en medios locales de su ciudad, como periódicos, revistas, estaciones de radio o canales de televisión. Tiene un gran interés por la cultura mexicana, incluyendo la música, la comida y la historia. Es un apasionado de los deportes, especialmente del fútbol.