Un taller intensivo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) pretende formar a jóvenes técnicos y
profesionales para crear emprendimientos rurales renovadores e impulsar la “revolución” del campo AgTech.

A pesar de la creciente aplicación de una extensa gama de nuevas tecnologías aplicadas a los sistemas agroalimentarios en Latinoamérica, aún
una gran parte de los pequeños productos, que forman una parte esencial de la base productiva, están extraños exactamente las mismas.

Por esta razón, la FAO lanzó el taller intensivo Ayllu AgTech para formar a jóvenes estudiantes, técnicos
y profesionales de la agricultura para diseñar emprendimientos renovadores rurales.

Según explican en su página, el Taller se desarrollará bajo la manera de un Bootcamp, “una metodología intensiva enfocada a adquirir conocimientos
prácticos y concretos para diseñar un emprendimiento regenerativo”, a través de sesiones presenciales que se efectuarán entre el trece y el diecisiete de noviembre
en Santiago de Chile.

“Existen muchas ideas que apuntan a los inconvenientes demográficos y al envejecimiento de la población en el campo, tratando de producir interés
en los jóvenes por la agricultura. Sin embargo, no podemos limitarnos a enfoques relacionados a empleo y protección social”, explica Souroush Parsa,
Oficial de Ciencia e innovación de la FAO para América Latina y el Caribe.

El propósito de este curso es asistir al desarrollo de la AgTech, o Agricultura Tecnológica, entendida como la aplicación de tecnologías
avanzadas en el campo agrícola, las que se emplean para asistir a progresar la productividad, la eficacia y la sostenibilidad de las operaciones
agrícolas.

Estas van desde la automatización, la robótica, la agricultura de precisión, la biotecnología, la monitorización y análisis de datos, la
inteligencia artificial hasta internet de las cosas (IoT), entre otras muchas soluciones tecnológicas.

“Así como sucede cara afuera en los países en desarrollo, hay una fuga de cerebros en cada país, un flujo de jóvenes técnicos y
profesionales que dejan su territorio rural de origen para buscar empleo y ocasiones en otros sectores”, advierte Parsa.

El público objetivo de Ayllu AgTech son jóvenes que tienen un saber experimental tradicional sobre la agricultura, y sobre el que han construido
saberes científicos.

“Queremos atrapar el valor de estos jóvenes, y presentarles la senda del emprendimiento tecnológico, como opción alternativa de empleabilidad y
generación de recursos en sus territorios de origen. Confiamos en los valores y en la potencia de la juventud para reducir la brecha que afecta a la
agricultura familiar en materia de innovación y tecnología”, concluyen.

Mercedes Cruz Ocaña