Ricardo Currás abandonó DIA hace poco más de un año, tras ser despedido por ‘los hombres de Fridman’ en plena toma de control de la compañía. Desde entonces, el exconsejero encargado de la multinacional de los supermercados ha descuidado el foco mediático de las grandes empresas y trabaja con startups, como es el caso de Famaex

Esta plataforma de reparación y mantenimiento ha fichado a Currás como consejero. La empresa, que ha preferido no hacer ninguna declaración a Vozpópuli, ficha al exCEO de DIA a fin de que le asesore con su negocio fundado en dos mil dieciseis y que cuenta con menos de cincuenta trabajadores. Se centra en conectar a empresas como Papa John’s, El Ganso o La Tagliatella con soluciones de fontanería, climatización, electricidad, cerrajería, cristalería o limpieza especializada para sus tiendas. 

Un pequeño proyecto para un directivo que ha estado al frente, a lo largo de cerca de diez años, de una multinacional que factura 8.000 millones. Pero este no es su único puesto de consejero en una compañía. Ricardo Currás forma parte desde enero tanto del consejo de administración de ActivH2O, una compañía que ofrece soluciones tecnológicas que dejan purificar el agua sin el uso de químicos, como del consejo de Wasteless, una compañía con sede en Tel Aviv dedicada a reducir el desperdicio de comestible. 

Investigación abierta

Mientras Ricardo Currás recomienda a estas startups, DIA tiene a cargo de la Fiscalía una investigación abierta sobre su vieja directiva de España y Brasil, a lo largo de la temporada de Ricardo Currás. Según especifica la auditoría de la asesora KPMG, la compañía halló a cierre de dos mil dieciocho rastros de «prácticas contables irregulares» a lo largo de la etapa de Currás como máximo responsable ejecutivo de la compañía. 

«Con el objetivo de esclarecer los hechos que dieron lugar a dichas incorrecciones, la compañía inició una investigación que puso de manifiesto la existencia de prácticas contables irregulares, llevadas a cabo por determinados empleados y altos directivos de España y Brasil, eludiendo los controles internos establecidos por el grupo», especifica KPMG en su informe. 

DIA congeló su indemnización 

Por otro lado, tal como especifica su memoria anual de dos mil dieciocho, la compañía controlada actualmente por ‘los hombres de Fridman’ está examinando la posibilidad de activar las cláusulas que dejarían demandar a los ejecutivos que abandonaron el conjunto el año pasado la devolución de las indemnizaciones y otros pagos entregados.

En particular, DIA estudia demandar al exconsejero delegado Ricardo Currás las indemnizaciones pagadas el año pasado. Currás recibió una indemnización de uno con tres millones de euros y dos anualidades de su remuneración fija anual que, en su caso, era de 681.000 euros

Según especifica la memoria anual de DIA pertinente a dos mil dieciocho, la Comisión de Nombramientos y Retribuciones «está analizando, para su elevación al Consejo de Administración, la activación de las cláusulas clawback sobre las distintas retribuciones abonadas a los consejeros ejecutivos cesados en 2018″.

En el caso de Currás se estudia «la reclamación de la devolución de cualquier cantidad que pudiera proceder». A la espera de la toma de la resolución que corresponda, «DIA ha suspendido el abono de la contraprestación económica por la obligación de no competencia post-contractual» del exconsejero encargado. Una resolución que no se va a saber hasta el momento en que se publique el informe de retribuciones de dos mil diecinueve.