avanzados, mas que puede asistirle a comprender y conseguir un conocimiento inicial sobre la materia
Una de las labores más bastante difíciles a las que deben enfrentarse los emprendedores cuando comienzan una idea de negocio es el de la
financiación. Y es que las start-ups son empresas que se hallan en sus primeras etapas de operación y por tanto, acostumbran a tener
contrariedades para lograr financiación.
Es esencial que las start-ups cuenten con suficiente capital para poder medrar y desarrollarse apropiadamente, mas ¿de qué manera conseguir financiación para
una start-up? En este artículo, se explorarán ciertas opciones que pueden asistir a las start-ups a conseguir el capital preciso para sacar adelante una
idea de negocio y lograr el éxito.
La primera opción que las start-ups deben estimar es el capital semilla. El capital semilla se refiere a la inversión inicial
que se efectúa en una start-up. Esta inversión puede proceder de amigos y familiares, business angels o de empresas de capital de peligro. Los business
angels son personas que están prestas a invertir en start-ups en sus primeras etapas de operación. Estos inversores acostumbran a estar prestos a aceptar
un mayor peligro a cambio de una participación en la compañía. Las empresas de capital de peligro, por otra parte, son empresas que invierten grandes sumas
de dinero en start-ups prometedoras a cambio de una participación en la compañía.
La segunda opción que las start-ups deben estimar es la financiación colectiva. Se refiere a la obtención de fondos a través
de una plataforma online donde las personas pueden efectuar donaciones o inversiones en la start-up. Las plataformas de financiación colectiva más
populares son Kickstarter y Indiegogo. Mediante estas plataformas, las start-ups pueden conseguir fondos de personas que creen en su proyecto y están
prestas a apoyarlo financieramente.
Las start-ups asimismo deben estimar el préstamo empresarial como otra de las opciones para lograr financiación. Con ,
las compañías consiguen fondos mediante un prestamista. Los préstamos empresariales pueden ser de corto o largo plazo y pueden ser empleados para
financiar una pluralidad de necesidades comerciales, como la adquisición de equipos o la contratación de personal. Sin embargo, es esencial tomar en consideración
que los préstamos empresariales acostumbran a requerir garantías personales y pueden ser bastante difíciles de conseguir para las start-ups que no tienen un historial
crediticio establecido.
Otra de las opciones que las start-ups deben estimar es la inversión de capital de riesgo. Se refiere a la inversión de
grandes sumas en una compañía a cambio de una participación en la compañía. Las empresas de capital de peligro acostumbran a estar prestas a
invertir en start-ups prometedoras, mas asimismo acostumbran a demandar un nivel alto de ROI. Por lo tanto, las start-ups han de estar
dispuestas para trabajar con los inversores de capital de peligro para cumplir con sus esperanzas.
No hay que olvidar la incubación como una forma de financiación de una start-up.Las incubadoras de startups son
programas que ofrecen a estas empresas una pluralidad de servicios, como espacio de oficina, guías y recursos financieros. Las incubadoras pueden ser
una genial opción para las start-ups que precisan ayuda para desarrollar su modelo de negocio y hacer medrar su empresa. Sin embargo, es esencial
tomar en consideración que las incubadoras acostumbran a demandar una participación en la compañía a cambio de sus servicios.
Tampoco hay que olvidar las ayudas ofrecidas por organismos estatales, como la que se anunció este año por la parte del Consejo de
Ministros, que autorizó la subscripción de 3 adendas a los convenios subscritos entre el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y la Empresa
Nacional de Innovación (ENISA) a fin de que esta desarrollase 3 líneas de préstamos participativos en 2022: la Línea de Empresa de Base Tecnológica, la
Línea Pyme y la Línea Jövenes Emprendedores. En concreto Industria concede quinientos siete préstamos
participativos por más de 83,8 M euros para financiar a pequeñas y medianas empresas y emprendedores en dos mil veintidos.
Por tanto, las start-ups tienen muchas opciones tratándose de conseguir financiación. Desde el capital semilla hasta los préstamos
empresariales y la inversión de capital de peligro, existen muchas formas de conseguir el capital preciso para hacer medrar una compañía en sus primeras
etapas de operación. Sin embargo, es esencial rememorar que cada opción tiene sus ventajas y desventajas, y que las start-ups deben valorar
esmeradamente cada opción ya antes de tomar una resolución.
Además, las start-ups asimismo deben tomar en consideración que la obtención de financiación no es una solución mágica para sus inconvenientes. Aunque la
financiación puede administrar el capital preciso para hacer medrar una compañía, las start-ups asimismo deben tener un modelo de negocio sólido, un
equipo talentoso y una estrategia clara para el éxito en un largo plazo. En última instancia, la obtención de financiación ha de ser vista como una
herramienta para asistir a las start-ups a lograr sus objetivos, no como una solución mágica que garantice el éxito.