Entrada gratis a los Juegos Olímpicos, transporte gratis, ciertas comidas gratis y otras ventajas: si no tiene otros planes para el verano de dos mil veinticuatro, esta es su ocasión de ir a Francia y transformarse en uno de los 45.000 voluntarios convidados a acoger los Juegos Olímpicos de París.

Puede resultar bastante difícil en estos instantes, dada la presente agitación que vive Francia y en particular París, con huelgas cada día y violentas quejas, imaginar que el país se vuelque con los Juegos.

Pero los preparativos del evento deben seguir y la busca está abierta a voluntarios de todo el planeta, mayores de dieciocho años, que charlen inglés o francés y deseen trabajar entre bastidores a lo largo de los Juegos Olímpicos o Paralímpicos.

Aunque la mayor parte de los voluntarios se precisan en París, hay unas cinco mil vacantes para otras sedes de los Juegos en Burdeos, Nantes, Marsella, Niza, Saint-Etienne, Lyon, Lille y Châteauroux.

Las candidaturas están abiertas y acá tiene el portal para apuntarse.

Experiencia interior

Ser voluntario de los Juegos de París dos mil veinticuatro es la ocasión de su vida, conforme los organizadores.

Los voluntarios son las primeras personas que los atletas y espectadores conocen cuando llegan a los Juegos, «así que se transformará en la cara de la hospitalidad de Francia y va a vivir desde dentro los primeros Juegos de verano organizados en el país en un siglo».

El programa de Voluntarios incluye un extenso abanico de labores. «Todas son esenciales para el buen funcionamiento de los Juegos: Seguro que existe alguna que se amolda a usted», promete la convidación a presentar la candidatura.

El trabajo está abierto a ciudadanos de todo el planeta, dura un mínimo de diez días y, al ser voluntario, no está retribuido, ni incluye alojamiento.

«Nuestros voluntarios van a estar en el corazón del mayor evento deportivo del planeta y contribuirán de forma directa a su éxito», explicó Tony Estanguet, presidente del comité organizador de París dos mil veinticuatro. «La energía positiva que transmiten los voluntarios es única y van a ser la cara de los Juegos».

Responsabilidades de los voluntarios

Según explica el comité organizador, los voluntarios «vivirán la atmosfera única de los Juegos» y van a tener el privilegio de ver desde dentro uno de los grandes espectáculos del planeta, si bien no está garantizado que el privilegio incluya un pase gratis a las pruebas deportivas. «Si se ha propuesto acudir a las competiciones, su opción mejor es adquirir una entrada y gozar de toda la acción desde las gradas», sugieren los organizadores.

«Hay una serie de ‘misiones’ en el programa de voluntariado», notifica Euronews, «desde dar la bienvenida a la gente en aeropuertos y estaciones hasta administrar información en las sedes, e inclusive recoger pelotas de tenis».

La lista oficial de trabajos incluye:

· Dar la bienvenida a personas de todo el planeta, desde las estaciones de ferrocarril y los aeropuertos hasta las diferentes sedes (por poner un ejemplo, competición, adiestramiento, Villa de los Atletas y centro de prensa); 

· Proporcionar orientación y apoyo en el centro de las sedes (asistir a los espectadores a subir a las gradas); 

· Facilitar información en el caso de contrariedades o dirigir a las personas a los contactos adecuados; 

· Proporcionar información sobre distintos programas, como información deportiva y cultural y instantes clave de los Juegos;

· Transportar a los participantes en los Juegos entre las sedes en minibuses o turismos de 9 plazas; 

· Asistir al personal médico (voluntarios licenciados en medicina). 

Condiciones para ser voluntario

Pueden presentarse personas de todas y cada una de las naciones, incluidas las de Rusia y Bielorrusia.

Algunos ciudadanos no pertenecientes a la Unión Europea precisarán el visado conveniente para continuar en Francia. Dependiendo del país, ciertos pueden entrar con un visado de turista por el hecho de que el trabajo no está retribuido y la estancia es parcialmente corta (mínimo diez días).

Las personas de países que se favorecen de la regla de los noventa días –permiso de visita de hasta noventa días– no precisarán visados singulares para efectuar su trabajo olímpico.

Si se admite su petición, deberán organizar su viaje y alojamiento.

Se precisarán voluntarios desde la apertura de la Villa de los Atletas hasta un par de días tras la clausura de los Juegos Paralímpicos, el diez de septiembre.

Se procuran singularmente personas con discapacidad y la meta informal es contar con por lo menos 3.000 voluntarios discapacitados como una parte del equipo.

La lengua francesa no es obligatoria. Se admiten tanto el inglés como el francés, mas el dominio de los dos es una ventaja.

Los aspirantes interesados en las relaciones humanas, los horarios o con un fuerte sentido de la hospitalidad se consideran más convenientes para el trabajo, de la misma manera que los apasionados del deporte.

Además de la pura gratificación de asistir, los organizadores destacan que puede ser una enorme capacitación y experiencia para el resto de su carrera.

Las peticiones están abiertas desde este momento hasta el tres de mayo de dos mil veintitres. La petición tarda entre treinta y cuarenta y cinco minutos y las notificaciones a cada demandante sobre si se le asignará o no un puesto de voluntariado se mandarán entre septiembre y diciembre de dos mil veintitres.