Después de crear un producto que la gente verdaderamente desea, llega un instante en el que debes mudar tus pensamientos precedentes, meditar a lo grande y escalar de forma más inteligente.
Es como sujetar tu barca casera y transformarla en un navío listo para conquistar los océanos. Sin duda, no es la labor más simple, mas al tiempo es muy apasionante.
Con las estrategias convenientes, tu start-up puede medrar más veloz y de forma más eficaz, a fin de que puedas arrancar tu navío de la manera más eficiente.
En este artículo, comprenderemos de qué forma llevar tu start-up a un nuevo nivel manteniéndote leal a su esencia.
Escalar no consiste solo en medrar, sino más bien en hacerlo de forma inteligente.
En mi opinión, carece de sentido hacer algo sin estrategia o algo que no pueda mejorarse con el tiempo.
No hay que limitarse a crecer; hay que tener una visión de de qué forma hacerlo.
Sería realmente difícil comprender qué hacer tras lograr algo si no tienes un sistema y un plan para tu enfoque.
Cada día brotan nuevos inconvenientes, y la mayor parte de ellos precisan soluciones inusuales. Por eso debe implantar el pensamiento modular en la administración de tu empresa.
Empieza por separar los procesos. No podrías comerte todo el pastel de una vez, primero debes dedicar un tanto de tiempo y esmero a cortarlo múltiples veces.
El mismo principio marcha con las start-ups. No tengas temor de los inconvenientes, son las barreras en tu camino, mas ¿quién afirmó que no podemos romperlas?
Hay infinitas soluciones para cada inconveniente, mas la primera es dividirlo en pedazos más pequeños. Quitando uno a uno los ladrillos del muro lograremos por fin estrellarlo.
En pocas palabras, se centra en diseñar y organizar estos inconvenientes de manera que puedan comprenderse y resolverse de manera fácil. Este enfoque te da mucha adaptabilidad, por lo que puedes seleccionar entre muchas opciones.
Por cierto, asimismo puede asistirte en la vida. Cuando veas un enorme objetivo y no sepas de qué forma lograrlo, solo debes dividirlo en otros más pequeños. Dando pequeños pasos, vas a llegar al sitio conveniente.
No importa lo grande y espantoso que sea el inconveniente, siempre y en toda circunstancia se puede dividir en algo más pequeño y menos espantoso.
Incorpora la magia del pensamiento modular a tu flujo de trabajo y vas a ver con qué sencillez se resuelven todos tus inconvenientes.
Ese fue mi fallo al comienzo. No dediqué suficiente tiempo a mi equipo y a la funcionalidad de todo el proceso.
Estaba ofuscado con hallar las mejores herramientas y las mejores estrategias de productividad. Estuve viendo cientos y cientos de vídeos y leyendo un montón de artículos que describían cada nueva herramienta.
Sin embargo, lo cierto es que pasé más tiempo ocupándome de esas herramientas que del proceso en sí.
Incluso el software más muy elegante no servirá de nada si tu equipo no está a bordo.
No es preciso que dediques la mitad del día a seleccionar qué herramienta es mejor para la mercadotecnia por e-mail, es suficiente con que tomes lo que marcha para el resto y te centres en cosas más esenciales.
Las herramientas se han inventado para asistirte a hacer tu trabajo más eficaz, no para quitarte todo tu tiempo.
Y créeme, seguramente no serías capaz de hallar la mejor herramienta, si bien tuvieses todo el tiempo del planeta. La resolución de usar una plataforma, software o aplicación concreta es tan compleja y subjetiva que es imposible hallar la perfecta.
Es mucho mejor dar prioridad al desarrollo del equipo, la capacitación y la cultura.
No digo que debas olvidarte de todas y cada una de las nuevas tecnologías y aplicaciones que salgan, sencillamente no hay que darle tanta relevancia. Como he citado, deben asistirte y no quitarte tu atención.
En tu tiempo libre, ¡no vaciles en echar una ojeada a ciertas de ellas e inclusive es posible que incorpores alguna inmediatamente!
Tus clientes del servicio son tu brújula. Puedes emplearlos para ir en la dirección adecuada y llegar poco a poco más lejos con el tiempo.
Cuanto más mires tu brújula, más seguro vas a estar de la dirección actual. Y no hay nada más esencial que escalar en la dirección adecuada, en vez de sencillamente escalar.
No hay nada extraño si tropiezas y te tuerces el tobillo. Todos cometemos errores; son los negocios, es la vida.
Así que, para crear este mítico bucle de retroalimentación del cliente del servicio, debes concebir una forma creativa de compilar información de tus usuarios. Puede ser sencillamente un formulario de Google con múltiples preguntas o aun una llamada Zoom 1-a-1 con tus clientes del servicio.
Dedicar tiempo a compilar creencias es tan esencial como crear el propio producto. Nunca infravalores esta parte, singularmente si eres una pequeña start-up que desea lograr cumbres poco a poco más altas.
Además, tras conseguir la información, debes hallar la manera de examinarla. Hay montones de guías y plantillas sobre de qué forma hacerlo bien. Es bastante vital si no deseas flotar en el océano de incertidumbres y gilipolleces sin clasificar.
Todo he de estar sistematizado y automatizado, te va a llevar una cantidad de tiempo notable al comienzo, mas lo agradecerás en el futuro.
Por supuesto, es bastante inútil recoger el retroalimentación de tus usuarios si no estás incorporando lo que desean. Hay que actuar.
Debería ser un bucle sin fin de recogida de creencias e implementación de nuevas funciones. Un término bastante simple, mas la mayor parte de las pequeñas start-ups no lo comprenden.
¿Tu start-up solo dependes de una fuente de ingresos? Es hora de explorar nuevos territorios.
Es una vieja filosofía conseguir ingresos de una sola fuente y de un solo producto. Aunque ciertas empresas se especialicen en un producto o servicio específico, prosiguen generando algo más.
Tomemos el ejemplo de Apple. El dispositivo más popular de Apple ahora es, como es lógico, el iPhone. Sin embargo, prosiguen fabricando un montón de otros productos, accesorios y ciertas cosas inútiles de las que absolutamente nadie ha oído charlar.
Apple no es la única. Incluso ciertas empresas muy centradas prosiguen creando algo más además de su producto primordial.
Cuando comienzas a diversificar, das múltiples opciones a tus clientes del servicio. Estás ampliando tu nicho y haciéndolo más agradable para más gente.
Piensa en upselling, cross-selling y nuevas líneas de productos.
Tampoco debes conseguir muchos beneficios de tu producto primordial. En ocasiones aun puedes perder dinero con él. Te lo explico.
Es una estrategia bastante sabia que no muchas empresas emplean. El término es fácil, pierdes dinero con un producto ancla, mas consigues beneficios con los auxiliares.
El costo de producción de una hamburguesa puede ser superior al coste de venta, por lo que pierdes dinero. Pero puedes ofrecer patatas fritas, salsas, bebidas, etc. Cada uno de estos productos auxiliares tiene un margen elevado. Y lo mágico es que la mayor parte de tus clientes del servicio seguramente adquirirán cuando menos alguno de ellos. (Porque absolutamente nadie desea comerse una hamburguesa sin solamente).
Xbox Series S asimismo es un enorme ejemplo. Como sabemos, es bastante asequible, y el costo del hardware es prácticamente superior al coste de venta. Sin embargo, tras adquirirla, puedes adquirir una subscripción con cientos y cientos de juegos. Microsoft perdió dinero con el hardware, mas consiguió beneficios con el software.
En resumen, cuando se comienza, es vital centrarse en un producto. Pero cuando estás escalando, es un juego totalmente diferente con reglas diferentes. ¡Produce más y diversifica!
La ampliación de tu start-up no es el proceso más simple, mas al tiempo es verdaderamente apasionante. Algunas de las reglas precedentes para crear una start-up desde cero no marchan y hay que concebir formas excepcionales de medrar, lograr logros e crear.
Recuerda que los negocios son como una guerra, siempre y en toda circunstancia debes ser mejor que tus oponentes y ser más creativo.
En conclusión, deseo que pienses verdaderamente en estas cuatro reglas bastante simples, mas duras al tiempo.
Bogotá (Colombia), 1989. Apasionado por la investigación y el análisis de temas de interés público. Estudió comunicación social en la Universidad de Bogotá y posteriormente obtuvo una maestría en periodismo investigativo en la Universidad de Medellín. Durante su carrera, ha trabajado en diversos medios de comunicación, tanto impresos como digitales, cubriendo temas de política, economía y sociedad en general. Su gran pasión es el periodismo de investigación, en el cual ha destacado por su habilidad para descubrir información relevante y sacar a la luz temas que a menudo se mantienen ocultos.