El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha expresado su preocupación por la situación de los desempleados mayores de 52 años que se encuentran cobrando el subsidio de desempleo. Durante unas jornadas sobre empleo organizadas por el sindicato UGT en Madrid, Pérez Rey calificó de “diabólica” la situación de este colectivo y defendió un decreto ley que había sido rechazado en el Congreso la semana pasada, el cual buscaba reformar los subsidios de desempleo para este grupo de personas. El objetivo era garantizar protección social y un nivel de vida digno para los parados. Sin embargo, el rechazo de esta propuesta ha llevado al Ministerio de Trabajo a buscar nuevas soluciones que cuenten con mayor consenso.
El secretario de Estado manifestó la responsabilidad de los poderes públicos en la no estigmatización de los desempleados y en la eliminación de obstáculos para una búsqueda de empleo efectiva. Lamentó la disminución de las cuantías del subsidio asistencial y anunció que se retomarán los trabajos para proteger con mayor dignidad a los perceptores del subsidio de desempleo.
Respecto a las políticas activas de empleo, Pérez Rey destacó la implementación de la Ley de Empleo aprobada en febrero de 2023, la cual ha generado la creación de un millón de puestos de trabajo en los que hubo algún tipo de intermediación de los servicios públicos de empleo en los primeros seis meses después de su aprobación. Aunque la tasa de desempleo se ha reducido al 11,8%, el secretario de Estado reconoció que aún persiste un colectivo de 2,7 millones de parados, un millón de los cuales se encuentran en situación de desempleo de larga duración.
Desafíos y perspectivas
A pesar de que la tasa de desempleo entre los jóvenes menores de 25 años se encuentra en su punto más bajo (alrededor de 200.000), la tasa de desempleo estructural continúa siendo la más alta de la Unión Europea. En ese sentido, Pérez Rey reconoció la necesidad de seguir trabajando en esa línea y destacó la transformación en el mercado laboral tras la reforma de 2021, que ha impulsado la creación de empleo indefinido, generando un panorama más prometedor.
Sobre las quejas de las patronales acerca de las dificultades para cubrir determinados puestos de trabajo, el secretario de Estado negó la existencia de un problema de vacantes en España y rechazó que la mayoría de los puestos por cubrir se concentren en el sector de la construcción, como han indicado algunas patronales. Indicó que la mayoría de los puestos de trabajo disponibles se encuentran en el sector público, y explicó que en muchos sectores el problema radica en las condiciones de trabajo, ya que no hay suficientes trabajadores dispuestos a desempeñar ciertas labores.
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