El fabricante de España de trenes Talgo ha firmado con la operadora ferroviaria alemana Deutsche Bahn el mayor pedido de su historia: un segundo encargo de cincuenta y seis trenes que se fabricarán en la planta de Rivabellosa (Álava) por un valor aproximado de mil cuatrocientos millones de euros. Este nuevo pedido es parte del contrato marco firmado en dos mil diecinueve por un máximo de cien trenes que ya se tradujo en un primer encargo de veintitres trenes que se están generando en la factoría alavesa, conforme ha explicado la compañía de España en una nota de prensa.
Con este segundo contrato, Talgo acrecienta hasta setenta y nueve las unidades a fabricar para la compañía ferroviaria alemana Deutsche Bahn, que ha lanzado un plan para ampliar su flota de trenes de gran velocidad, conforme ha comunicado la compañía. Y es que, coincidiendo con la firma de tal contrato marco en el mes de febrero de dos mil diecinueve, se subscribió un primer pedido para el suministro de veintitres trenes Talgo doscientos treinta autopropulsados para una velocidad máxima de doscientos treinta km/h.
Estas cincuenta y seis nuevas unidades van a ser idénticas a las veintitres que en la actualidad están en producción y que van a entrar en funcionamiento gradualmente desde otoño de dos mil veinticuatro. Los nuevos trenes, bajo el modelo Talgo doscientos treinta, van a ser operados por Deutsche Bahn en toda Alemania bajo la marca comercial ICE, que designa los servicios de gran distancia y gran velocidad. La ejecución del proyecto empezará una vez que se acuerde la estructura de financiación. El volumen total del segundo pedido asimismo incluirá una petición de cambio (change request) que afecta al diseño y añadidos.
En dos mil veintidos, Talgo redujo su beneficio un noventa y cinco%, hasta los uno con cuatro millones de euros, lastrado por los aumentos de costos y la carencia de suministros. Los ingresos del fabricante de trenes cayeron más de un quince% (cuatrocientos sesenta con uno millones). Al cierre de dos mil veintidos, Talgo contaba con una cartera de pedidos que se ubica en los dos mil setecientos cuarenta y ocho millones de euros, o en los tres mil millones de euros si se tienen presente los contratos adjudicados pendientes de cumplimiento de condiciones precedentes, lo que asegura una actividad industrial plena para el periodo dos mil veintitres-dos mil veinticinco. El más esencial es el de Deutsche Bahn, que ahora se aumenta con las cincuenta y seis nuevas unidades.
Diseño de los trenes
Estos nuevos trenes van a tener más espacio, van a estar compuestos por una locomotora que da tracción a diecisiete vehículos de viajantes, de los que el último incorpora una cabina de conducción para flexibilizar la operativa, una configuración ignota en España mas frecuente en Alemania. Además, van a contar con suelo bajo y a nivel de andén en sus vehículos, siendo por consiguiente absolutamente alcanzables, explica el fabricante de España.
La locomotora, desarrollada íntegramente por Talgo, es multisistema e interoperable, por lo que dejará que los trenes viajen no solo en Alemania, sino más bien asimismo en servicios internacionales, conectando Berlín con Ámsterdam sin detenerse en la frontera. La composición va a ser además de esto compatible con locomotoras de otros fabricantes para operarse, por poner un ejemplo, en líneas no electrizadas.
Cada tren ofrece quinientos sesenta y dos plazas, ochenta y cinco de ellas en primera clase y cuatrocientos setenta y siete en segunda, incluyendo un vehículo cafetería y otro exclusivo para personas de movilidad reducida. Estos nuevos vehículos, apunta la compañía, incorporan por vez primera un nuevo género de ventana desarrollada para progresar la cobertura de telefonía y datos móviles a bordo.
Según ha apuntado el presidente de Talgo, Carlos Palacio Oriol, este contrato es una enorme nueva para la industria ferroviaria de España y sus tecnologías, por el éxito que supone afianzar una referencia nacional en el mercado ferroviario de gran distancia más activo y exigente de toda Europa.
Por su parte, Michael Peterson, consejero de Deutsche Bahn para Transporte de Viajeros en Larga Distancia, ha explicado que la compañía se someterá en el futuro próximo a una profunda renovación, tanto de la red ferroviaria como de los trenes. Como una parte de este proceso para remozar la flota, la compañía va a recibir una media de 3 trenes ICE nuevos al mes.