Los costos de producción industrial, que recogen el costo de los productos a salida de factoría, experimentaron en Alemania el mes pasado de septiembre una caída interanual del catorce con siete%, lo que significa el descenso más acusado desde el momento en que se comenzaron a compilar estos datos en mil novecientos cuarenta y nueve. Los costos industriales ya venían de una caída resaltable en el mes de agosto, del doce con seis%. Según la Oficina Federal de Estadística (Destatis), esta evolución se atribuye primordialmente a un efecto de base debido al muy elevado nivel de costos del año pasado, cuando la guerra en Ucrania provocó un incremento de los costos de producción en el mes de agosto y septiembre que fue, a su vez, el más alto desde el momento en que existen registros.
Durante una buena parte del año pasado se batieron récords en el costo de los productos a salida de factoría. El gran culpable de las subidas fue el coste de la energía, que estuvo disparado a lo largo de múltiples meses seguidos. Los costos de producción industrial se consideran un predecesor del desarrollo de la inflación, por lo que las cantidades registradas entonces señalaban que la subida se iba a trasladar a los bolsillos de los usuarios, como así sucedió.
Ahora se espera el efecto opuesto, o sea, una mayor moderación de la inflación, que por fin ha comenzado a remitir. En septiembre se situó en el cuatro con cinco%. Un alivio para los usuarios alemanes, por el hecho de que si bien la cesta de compra prosigue altísima, por fin pueden festejar que es el menor incremento desde febrero de dos mil veintidos, cuando reventó la guerra de Ucrania. Expertos como el economista jefe de ING, Carsten Brzeski, aguardan que la tasa de inflación pueda caer a fines de año hasta alrededor del tres%.
Según Destatis, los costos más bajos de la energía son la primordial razón de la caída interanual de los costos de producción. Los recursos intermedios asimismo cuestan menos que hace un año, si bien por los recursos de consumo y de capital hubo que abonar costos más altos que en el mes de septiembre de dos mil veintidos.
Los costos de la energía han bajado este septiembre un treinta y cinco con tres% respecto a septiembre de dos mil veintidos, lo que supone asimismo una genial nueva para el ámbito manufacturero alemán, aparte de para los usuarios privados. El recibo energético se había disparado tras el comienzo del ataque ruso a Ucrania en el mes de febrero de dos mil veintidos, y alcanzó un máximo histórico justamente en el mes de septiembre de dos mil veintidos. En específico la electricidad es lo que más ha influido en la caída. Para todos y cada uno de los conjuntos de clientes del servicio, el coste de la luz ha descendido un cuarenta y seis con dos% con respecto al año precedente. Pero asimismo el gas natural ha dado buenas noticias (-treinta y seis con nueve%), como los productos petrolíferos (-nueve%) y el fuel para calefacción (-diez con nueve%).
“Alemania está haciendo claros progresos en la lucha contra la inflación”, asevera en Der Spiegel el economista Sebastian Dullien, directivo del Instituto de Macroeconomía e Investigación Económica (IMK) de la Fundación Hans Böckler. “La evolución actual es también un indicio más de que la interpretación de la inflación actual como una inflación desencadenada por perturbaciones externas de los precios, sobre todo de la energía, era correcta”, agrega.