La presidente de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), Cristina Herrero, ha declarado este jueves que no se puede cuestionar la independencia y calidad de las evaluaciones de la corporación. Herrero ha respondido así a las críticas que ha lanzado el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, sobre su reciente análisis del ingreso mínimo vital (IMV), en el que la Airef aseveraba que la prestación se atasca y que más de la mitad de los hogares que podría recibirla ni tan siquiera lo pide. La presidente del organismo encargado de tutelar las cuentas públicas ha señalado que se puede aguardar que haya “discrepancias y diferencias sustentadas en argumentos”. Sin embargo, ha advertido de que “en ningún caso caben las descalificaciones que puedan poner en tela de juicio los análisis y conclusiones” de la corporación. Escrivá ha dicho más tarde, en una intervención en París, sentirse sorprendido por esas críticas, que ha considerado que parten de una “visión muy estrecha de lo que es la independencia”.

“En mi opinión no es bueno pasar de la Airef al Gobierno y, por supuesto, sería imposible pasar del Gobierno a la Airef. Como presidenta estoy al servicio de la institución”, ha dicho Herrero al ser preguntada por si sería ministra en un hipotético Ejecutivo del PP. La relación con su predececesor en el cargo no semeja pasar por su mejor instante. De hecho, se ha expresado de manera directa sobre el salto que dio José Luis Escrivá, que pasó de presidente de la Autoridad Fiscal a ministro del Gobierno de Pedro Sánchez. “Cuando se produjo ese paso, sentí que había que reafirmar la independencia. Puede ser muy positivo para el país y sin duda lo ha sido. Pero esta vinculación entre Gobierno y Airef obliga a la institución a tener que demostrar todavía más su análisis y su actividad independiente”, ha asegurado. Estas declaraciones han tenido sitio este jueves en Santander en las jornadas sobre economía de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) y la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, patrocinadas por el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria.

Herrero ha recordado que hace continuas comparecencias frente al parlamento; que publica sus informes con la información en la que se basan; que tiene un consejo consultor independiente, y que ha propuesto que un conjunto de especialistas valore de forma externa el desempeño de la Autoridad Fiscal. “Las instituciones fiscales independientes no son instituciones cómodas por sus funciones y rompen la asimetría de la información que muchas veces caracteriza la actuación pública. Hay ciertos pronunciamientos que pueden resultar molestos. Los gobiernos pueden tener la tentación de cuestionar nuestra legitimidad, desprestigiar el análisis o limitar los recursos. No basta con la independencia que da la ley. Requiere la protección de la Comisión Europea”, ha incidido la presidente de la Airef.

La presidente de la Airef ha insistido en proteger la tarea del organismo. “La discrepancia es buena, el diálogo es bueno, pero creo que hay unos límites de lealtad institucional que no deben sobrepasarse”, ha abundado tras el choque con Escrivá por el ingreso mínimo vital. En el informe se recogía que el número de hogares que recibió esta ayuda no contributiva se sostuvo prácticamente igual que un año ya antes, en doscientos ochenta y cuatro mil familias, lo que supone poco más de una tercera parte de los ochocientos hogares que potencialmente podrían recibirlo.

La presidente del organismo ha explicado que hubo 7 interlocuciones anteriores con el ministerio ya antes de la publicación del documento, por lo que todas y cada una de las observaciones que pudieron recogerse se hicieron. Y ha añadido que la información con la que se realizó el estudio era de las bases de datos de la Seguridad Social y la Agencia Tributaria. “Me ha sorprendido bastante el pronunciamiento del ministerio. Ha sorprendido a nuestro consejo asesor, a los expertos. Era algo que ya se sabía. La Airef realiza sus análisis desde la independencia”, ha zanjado.

La Airef ha explicado que no ha podido examinar las duplicidades del ingreso mínimo vital con las ayudas de las comunidades pues la información que dan estas no es buena. Pero eso no quiere decir que acepte que los datos son de mala calidad y que contaminan el análisis, como mantiene el departamento de Escrivá. “Son los de las Administraciones. No hay teorías ni supuestos elaborados por la Airef, las cifras son incontestables”, ha protegido Herrero. Además, ha explicado que, conforme se desprende de las aseveraciones del ministerio, semeja que la Airef ve como algo negativo que alguien salga de la prestación. “¿Cómo lo va a considerar negativo? Lo importante es que el ingreso mínimo vital consiga su máximo potencial”, ha indicado.

Nuevo marco fiscal

La Autoridad Fiscal es una demanda europea que nace a causa de la crisis de dos mil ocho para poner un control al incremento de la deuda pública. Se crea como un supervisor independiente en dos mil trece y se financia con una tasa que financian todas y cada una de las Administraciones Públicas. Con la pandemia y la guerra de Ucrania se ha postergado la necesidad de reconducir en un medio plazo la situación de vulnerabilidad de las cuentas públicas. Pero desde el próximo año vuelven las reglas europeas que imponen la disciplina fiscal. “Lo que era una recomendación se ha convertido en una obligación ineludible”, ha subrayado Herrero.

La Airef proyecta para los próximos años un desarrollo en torno al dos% y un estancamiento del déficit público en torno al tres%, con una deuda pública sobre el cien%. En esta situación se infringirían los objetivos de déficit y deuda europea. Habría poquísimo margen para hacer en frente de las presiones que van a surgir por el envejecimiento de la población, al paso que el peso de los intereses va a ser cada vez mayor. “Hay que actuar cuanto antes para reducir el tamaño de los ajustes”, ha instado la presidente de la Airef.

Con el nuevo planteamiento que se baraja en Europa, de entrada no es preciso bajar el déficit en un año específico. Se da margen para hacer el ajuste a más años. Pero a cambio hay una mayor exigibilidad y hay que sostener una ruta de gasto de forma estructural que hace que la deuda no suba, ha comentado Herrero. Con las nuevas reglas fiscales que se están finalizando en Europa, en los diez años siguientes debe haber un descenso de la deuda con un grado de probabilidad aún por decidir. Según ha explicado Herrero, esto no es sencillo de determinar pues demanda hacer un análisis estricto de sostenibilidad. No vale con el envío a Bruselas de un mero documento formal como el Programa de Estabilidad, ha asegurado. Y ha recordado que, conforme con la propuesta de la Comisión Europea, va a haber un examen de la corporación fiscal independiente para valorar si esto es así. El papel de la Airef va a ser por consiguiente clave en la consolidación fiscal que hay que abordar.