Los inversores han recibido con los brazos abiertos a Instacart. Las acciones de la empresa que vende productos de alimentación a través de internet y los reparte a domicilio se han estrenado con una fuerte subida al empezar a cotizar, que ha llegado a ser del 43% en su momento álgido. Al final, cerraron con un ascenso del 12,33%. Se repite así el éxito de la firma de microprocesadores Arm, que debutó la semana pasada con una subida del 25% en su primera sesión.

Instacart elevó la banda de precios cuando vio la fortaleza de la demanda y el precedente de Arm. Y este lunes fijó el precio en el punto más alto de esa horquilla, en 30 dólares por acción. Ese precio implicaba valorar la compañía en unos 10.000 millones de dólares si se tienen en cuenta los títulos pendientes de emitir para retribución de directivos y otros compromisos. Con la revalorización inicial, había superado los 14.000 millones de dólares. La cotización ha alcanzado un máximo de 42,95 dólares, aunque luego ha cedido terreno y ha cerrado a 33,70 dólares.

La valoración, eso sí, se queda muy lejos de la que llegó a alcanzar durante la pandemia: 39.000 millones de dólares en una ronda de financiación de 2021 en la que se emitían pocas acciones. La sociedad que sale a Bolsa es Maplebear, firma con sede en san Francisco fundada en 2012 y dueña de Instacart, una aplicación que colabora con más de 1.400 enseñas minoristas nacionales, regionales y locales para facilitar la compra en línea y los servicios de entrega y recogida en más de 80.000 tiendas de toda Norteamérica. La compañía, además, ha diversificado su negocio con la publicidad en su plataforma, pues cobra por anuncios o posiciones destacadas en ella. Ese segmento está siendo especialmente rentable.

La empresa está creciendo con fuerza. Las ventas canalizadas a través de la plataforma aumentaron de 5,144 millones de dólares en 2019 a 28,826 millones en 2022, un ritmo de crecimiento medio anual acumulado del 78%. Los ingresos de la compañía propiamente dichos han aumentado aún más rápido, de 214 a 2.551 millones de dólares entre esos mismos años, a un ritmo del 128% anual. En el primer semestre de este año facturó 1.475 millones de dólares, un 31% más que en el mismo periodo de 2022. Logró un beneficio operativo de 269 millones de dólares, frente a pérdidas de 73 millones en la primera mitad del año pasado.

Mercedes Cruz Ocaña