El aspirante del Partido Popular a la presidencia del Gobierno, Alberto Núñez Feijóo, no suprimirá los impuestos expepcionales sobre las compañías energéticas y los bancos aprobados por el Ejecutivo de Pedro Sánchez. El anuncio, en una entrevista con el Financial Times, llega poquitos días una vez que el líder conservador aseverase asimismo que, de llegar a La Moncloa, no derogaría la reforma laboral que su capacitación política tanto ha combatido.
En la charla con el diario británico, uno de los más influyentes en el planeta de los negocios, Núñez Feijóo estima que estos tributos fueron “mal diseñados” y precisan mejoras, mas asevera que no los suprimirá. “Tenemos que ajustar el riesgo legal en el que estamos incurriendo; no es el modelo adecuado”, apunta el aspirante conservador, al paso que se abre a “hablar con las energéticas y con los bancos para recurrir a su solidaridad y buscar la mejor manera de que contribuyan a reducir la deuda y el déficit público”.
El anuncio es un jarrón de agua fría para las compañías del ámbito financiero y energético, que llevan meses litigando contra estas tasas excepcionales —que gravan su facturación y no sus beneficios, como acostumbra a ser habitual— y que confiaban en un giro en el caso de una potencial victoria del PP. La banca, en verdad, ya temía en los últimos días una prolongación del impuesto alén de dos mil veinticuatro gane quien gane los comicios del próximo día veintitres.
El expresidente gallego lleva meses haciendo equilibrios con el tema del impuesto excepcional a estos ámbitos, dos de los que más se han visto favorecidos por la invasión rusa de Ucrania, la inflación y la áspera subida de los modelos de interés.
Hace un año, justo una vez que el Gobierno anunciara la puesta en marcha de los dos impuestos, Núñez Feijóo acusó a Sánchez de hacer “el mayor populismo en materia fiscal en Europa” mas evitó pronunciarse particularmente sobre las dos figuras fiscales. Más últimamente, a fines de mayo, el aspirante del PP dejó entrever en una intervención en el Cercle d’Economia que los suprimiría. Del impuesto sobre la banca deslizó que si se quiere solventar el aumento de las hipotecas se puede “crear un fondo con la banca, pero no crear un impuesto que está judicializado y que previsiblemente tendrá que devolverse”. Del tributo sobre las energéticas, aseveró que “parece que está hecho para perderlo y lo devuelvan” y criticó “este tipo de políticas, que quizás captan votos pero no inversión”.