En una decisión que ha sorprendido a las empresas Abertis y ACS, el Estado de Texas ha revertido la titularidad de la autopista SH-288, la cual era la mayor concesión de autopistas en Estados Unidos para ambas compañías.
La Comisión de Transportes de Texas suspendió las negociaciones con las empresas, y el Estado ha optado por recuperar la propiedad de la autopista mediante el pago de 1.732 millones de dólares, con una parte importante destinada a Iridium Infraestructuras, filial del Grupo ACS.
Esta decisión implica que la autopista SH-288, que aún tenía más de 40 años de plazo de explotación, volverá a ser de propiedad pública en Texas. A pesar de esto, ACS ha comunicado que esta terminación no afectará significativamente a sus beneficios consolidados proyectados para 2024.
La infraestructura de la autopista había tenido un buen desempeño desde su apertura en noviembre de 2020, según ACS, sin embargo, la Comisión de Transportes consideró que era más ventajoso finiquitar el contrato concesional en este momento.
En 2023, ACS adquirió el 100% del capital de la concesionaria de la autopista SH-288, y posteriormente traspasó la mayoría a Abertis, que pagó una suma significativa por el porcentaje de la autopista, generando una plusvalía para ACS al cierre del año.
Esta situación marca un nuevo rumbo en la gestión de autopistas en Estados Unidos y plantea interrogantes sobre el futuro de las concesiones en el país, así como sobre la relación entre entidades privadas y públicas en el ámbito de las infraestructuras de transporte.