La criptomoneda, uno de los instrumentos financieros más jóvenes, continua dictando las conversaciones financieras globales en dos mil veintitres. En medio de gigantes establecidos como Bitcoin, aparece en juego un nuevo jugador, InQubeta (QUBE), que abre nuevas ocasiones para inversores y participantes del mercado con la combinación de soluciones de IA y blockchain.
Satoshi Nakamoto presentó Bitcoin con peculiaridades descentralizadas y una revolucionaria tecnología blockchain que formó la base de una revolución digital. Fue el whitepaper de Nakamoto publicado en dos mil ocho el que sentó las bases sólidas de blockchain sobre las que se edifica todo el mercado criptográfico.
El viaje en la montaña rusa de Bitcoin y XRP
Surgió de un experimento como moneda descentralizada para transformarse en un fenómeno global. Inicialmente, el coste de Bitcoin era menos de un centavo, mas hoy ha crecido más de treinta y ocho con cero dólares estadounidenses por token. Como tal, resulta atrayente tanto para los entusiastas individuales para los actores institucionales.
La situación de Bitcoin en el planeta financiero es esencial conforme las instituciones lo están adoptando, incluidos países y plataformas.
Por otro lado, Ripple Labs creó XRP para abordar los inconvenientes de eficacia, uso de energía y escalabilidad asociados con Bitcoin y ofrecer a los usuarios una solución sólida para pagos transfronterizos rentables.
La plataforma emplea XRP Ledger que tiene un mecanismo de acuerdo más eficaz donde las transacciones se validan de manera rápida y son más económicas que Bitcoin. Ripple Labs actúa a nivel del mundo asociándose con bancos, distribuidores de pagos e instituciones financieras.
Esta cooperación tiene como propósito agilizar los pagos transfronterizos y las trasferencias internacionales de dinero, transformando a XRP en un actor clave para facilitar transacciones financieras eficaces.
XRP, que hoy en día ocupa el quinto sitio en capitalización de mercado con más de treinta y dos con cinco mil millones de dólares estadounidenses, se ha transformado en un nombre familiar en el mercado de las criptomonedas.
InQubeta y el surgimiento de QUBE
En el activo espacio cripto, InQubeta se resalta como una plataforma que cierra la brecha entre los inversores y las nuevas empresas de IA. Centrado en el futuro de la tecnología, particularmente la Inteligencia Artificial, InQubeta presenta una solución renovadora para democratizar las inversiones en este ámbito de veloz desarrollo.
El token QUBE, un activo ERC-veinte en el centro del ecosistema de InQubeta, representa una puerta de entrada a inversiones fraccionadas en nuevas empresas de IA.
Su estructura de tarifas única, que incluye un impuesto de adquiere y venta del dos% para una burn wallet y un impuesto de venta del cinco% dirigido a un fondo de recompensas, estimula a los holders a hacer staking y ganar.
Esta integración en el marketplace NFT de InQubeta añade una capa de fluidez a las ocasiones de inversión fraccionadas.
El éxito de la preventa de InQubeta, que superó los cinco,5 millones de dólares estadounidenses, significa no solo respaldo financiero sino más bien asimismo confianza de los inversores en QUBE y las nuevas empresas de IA que respalda. La creciente confianza y esperanza en el token sugieren un futuro positivo conforme avanza por su cuarta etapa de preventa.
Mirando cara el futuro: La visión de InQubeta
La visión de InQubeta va alén de las esperanzas de la preventa actual. InQubeta NFT Marketplace, InQubeta Swap e InQubeta DAO revelan el deseo del lugar de medrar.
La máxima prioridad del proyecto es la ambición en la diversificación del ecosistema de inversión y transformarse en una plataforma realmente multicadena para el primer trimestre de dos mil veinticuatro.
A medida que el planeta prosigue adoptando la inteligencia artificial, plataformas como InQubeta crean nuevas fronteras al ilustrar la conexión entre innovación y ocasión.
De hecho, el token QUBE tiene el potencial de dejar su huella en el naciente espacio Web3, merced a las peculiaridades y ofertas únicas de InQubeta.
Monterrey (México), 1990. Estudió una licenciatura en comunicación y comenzó trabajando en medios locales de su ciudad, como periódicos, revistas, estaciones de radio o canales de televisión. Tiene un gran interés por la cultura mexicana, incluyendo la música, la comida y la historia. Es un apasionado de los deportes, especialmente del fútbol.
