A veces, una buena idea y muchas horas de dedicación son suficientes para destacar. Es el caso de Iván González (BarrasaDev) y Cristhian León, dos estudiantes de Grado Superior en Desarrollo de Aplicaciones del IES El Cañaveral, en Móstoles. Lo que comenzó como su Trabajo de Fin de Grado (TFG) se ha transformado en un videojuego que ya supera los 600.000 jugadores en menos de dos meses, sin publicidad ni inversión externa.
El juego, llamado Picross, se basa en los clásicos rompecabezas japoneses conocidos como nonogramas, que desafían al jugador a descubrir imágenes ocultas rellenando una cuadrícula a partir de pistas numéricas. Sin embargo, los madrileños no se limitaron a replicar el concepto: añadieron niveles, sistema de puntuación, perfil de usuario y una tabla de clasificación, lo que ha convertido la experiencia en algo más competitivo y dinámico.
Iván, con experiencia previa como desarrollador de proyectos como la red social Nexbi, fue el encargado de programar la versión web y la arquitectura que conecta el juego con los usuarios. Por su parte, Cristhian se sumó al proyecto para trabajar en la versión móvil, aún en desarrollo, que se lanzará próximamente en iOS y Android con una funcionalidad destacada: la posibilidad de jugar sin conexión a internet.
El crecimiento del juego ha sido completamente orgánico. Ni campañas de anuncios, ni influencers, ni financiación externa. Según sus creadores, la clave está en la simplicidad del diseño, la jugabilidad adictiva y la competitividad entre jugadores. La comunidad ha crecido rápidamente y no muestra señales de frenarse.
Con la aplicación móvil a punto de salir, los desarrolladores planean ahora dar un paso más: iniciar campañas de promoción para llegar a más público, mejorar el juego con nuevas funcionalidades y reforzar su presencia en redes.
“Cuando trabajas en un proyecto en el que te gusta y confías en él, todo es mucho más fácil”, comenta Barrasa.
El éxito de Picross demuestra que, incluso desde el entorno académico, un proyecto bien ejecutado puede abrir la puerta a miles de usuarios en todo el mundo.

Santander (España), 1985. Después de obtener su licenciatura en Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid, decidió enfocarse en el cine y se matriculó en un programa de posgrado en crítica cinematográfica.
Sin, embargo, su pasión por las criptomonedas le llevó a dedicarse al mundo de las finanzas. Le encanta ver películas en su tiempo libre y es un gran admirador del cine clásico. En cuanto a sus gustos personales, es un gran fanático del fútbol y es seguidor del Real Madrid. Además, ha sido voluntario en varias organizaciones benéficas que trabajan con niños.