El inicio de los viajes del Imserso puede retrasarse entre dos y tres meses, por lo que casi 900.000 beneficiarios, la mayor parte de ellos pensionistas, tendrán que esperar hasta noviembre o principio de diciembre para su solicitarlos. El posible retraso es consecuencia de la decisión adoptada por el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC), que ha admitido la petición de Soltour, Nautalia y Mundiplan de suspender cautelarmente la adjudicación a Ávoris de todos los lotes de los viajes para la temporada 2023-2024 que debía iniciarse este mes de septiembre.
El Tribunal ha admitido la petición de suspensión cautelar de la contratación que realizaron los grupos hoteleros que no resultaron adjudicatarios de los tres lotes de los viajes por parte del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), al entender que, en caso de permitir a Ávoris continuar adelante con las contrataciones, se les causaría un perjuicio de “imposible reparación”. No obstante, la suspensión cautelar no presupone la admisión de los recursos ni la resolución del fondo del asunto. En caso de que finalmente se admitan esos recursos, el procedimiento puede derivar en un retraso en la contratación de los viajes, que debía iniciarse entre mediados de septiembre y comienzos de octubre, de hasta tres meses.
El TACRC, dependiente del Ministerio de Hacienda, ha decidido “la suspensión automática de la tramitación del expediente de contratación, de conformidad con lo establecido en el artículo 53 de la Ley de Contratos del Sector Público (LSCP)”, según la resolución de adopción de medida cautelar de la Secretaria General de TACRC publicada este lunes en la plataforma de contratación del Estado.
De acuerdo con el documento, el análisis de los motivos que fundamentan la interposición de los citados recursos “pone de manifiesto que los perjuicios que podrían derivarse del levantamiento de la suspensión son de difícil o imposible reparación, por lo que procede acordar el mantenimiento”. Solo cuando se resuelva el fondo de los recursos, se levantará la suspensión cautelar.
El Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, del que depende el concurso, ha restado importancia a la decisión del tribunal y confía en que no repercuta en un retraso en los viajes. “Estamos a la espera todavía de saber si el TACRC ha admitido a trámite los recursos, la suspensión de la contratación es algo que se hace casi automáticamente por la ley de contratos cuando se interpone un recurso”, han indicado desde el departamento que dirige Ione Belarra. “Todavía no sabemos si va a haber un retraso, cada uno de los recursos interpuestos son diferentes, e incluso aunque se admita alguno de ellos puede que no haya ningún tipo de retraso, por lo que todavía vamos a tiempo para empezar a viajar a finales de octubre como normalmente”, han añadido.
No es la primera vez que las empresas licitadoras impugnan el resultado del concurso, causando un serio perjuicio a la campaña. Ya ocurrió en la temporada 2021-22, en la que los recursos y la pandemia del coronavirus hicieron que el programa de viajes no arrancara hasta enero de 2022, y que solo se ejecutara en un 60%. Sin embargo, en la temporada pasada 2022/2023, la comercialización se inició el 20 de septiembre, de acuerdo al calendario previsto.
El grupo turístico mallorquín Avoris Corporación Empresarial se adjudicó el pasado mes de julio los tres lotes de los viajes del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) para la temporada 2023-24, dependiente del Ministerio de Asuntos Sociales. Soltour y su socio Guest Incoming recurrieron el lote 1 (costa peninsular) al no estar de acuerdo con la valoración del mismo por los criterios de calidad. Por su parte, la Unión Temporal de Empresas (UTE) Seniorplan 2.0 —integrada por Seniorplan, Nautalia y Autocares Vera— recurrió la adjudicación del lote 3 de turismo interior y naturaleza. Finalmente, Mundiplan —la UTE integrada por Iberia, Alsa e IAG7— ha presentado un recurso contra la adjudicación de los lotes 1 y 2 (turismo peninsular e insular), según fuentes del sector.
Valorado en 842,9 millones de euros y con un importe total de 71,7 millones de subvención, se trata de un programa crucial para los intereses de la industria turística para la temporada baja, en el periodo que va desde octubre a junio. Cuenta con 886.269 viajes, de las que el lote 1, de costa peninsular, acapara la mitad con 443.887 plazas; le sigue el lote 2, de costa insular, con 230.039, de los que 120.000 corresponde a Baleares; mientras que el número 3, de turismo de escapada y procedencia europea, suma 212.343.
El retraso en el inicio de la comercialización de los viajes del Imserso supone un revés para los hoteles. La patronal valenciana Hosbec estima que están en juego 13.000 empleos en los hoteles adheridos al programa en la Comunidad Valenciana, uno de los grandes destinos de estos viajes.
