La mayor promotora inmobiliaria de China, Country Garden, anunció hoy unas pérdidas de 48.932 millones de yuanes (6.145 millones de euros) en el primer semestre. La compañía ya había alertado este mes de que, en los primeros seis meses del año, sus pérdidas podrían alcanzar los 55.000 millones de yuanes (6.943 millones de euros), algo que contrasta con el beneficio neto atribuido de 612 millones de yuanes (77 millones de euros) que registró en el mismo período de 2022. En la cuenta de resultados que remitió hoy a la Bolsa de Hong Kong, Country Garden achacó sus pérdidas a “la contracción del sector inmobiliario” y a que los mercados de capitales “todavía no han recuperado la confianza”, lo que se tradujo en “una creciente presión sobre las operaciones de negocios de la compañía”.

La facturación del grupo aumentó un 39,4% hasta los 226.309 millones de yuanes (28.445 millones de euros), experimentando asimismo un aumento del 41,2% en los ingresos provenientes de ventas de propiedades, que representan casi el 98% del total. No obstante, sus costes se dispararon un 72,6% hasta los 250.572 millones de yuanes (31.497 millones de euros): “Para garantizar la entrega puntual de las propiedades construidas y el buen funcionamiento de los negocios, la compañía tuvo que encontrar un equilibrio entre el volumen de ventas y el precio de venta en algunas de sus promociones”, explicó la firma. Country Garden también citó el bajo margen de algunos de sus proyectos y el aumento de las provisiones por deterioro (del valor) de las promociones como factores que lastraron sus cifras de beneficios.

Pérdida de liquidez

Al cierre del semestre, la promotora contaba con un pasivo total de unos 1,36 billones de yuanes (171.439 millones de euros), cifra dentro de la que las deudas que devengan intereses ascienden a unos 257.910 millones de yuanes (32.409 millones de euros). “Pese a que la compañía ha hecho todo lo posible para afrontar los pagos de las deudas e intereses de financiación obtenida onshore y offshore (en China y en el extranjero), la liquidez disponible continuó disminuyendo ante el deterioro de los rendimientos por ventas y la debilidad del entorno de refinanciación este año”, indica el documento. “Como resultado, la compañía se está enfrentando de forma progresiva a una situación de presión de liquidez”, agrega Country Garden, que afirma haber previsto el actual ciclo negativo en el sector, pero no su “profundidad y persistencia”, que le “cogieron con la guardia baja”, especialmente en el caso de las ciudades de menor tamaño en China, en cuyos mercados reconoce que invirtió “cantidades desproporcionadamente grandes”.

Al término del semestre, el grupo contaba con efectivo y equivalentes por 101.115 millones de yuanes (12.710 millones de euros), un 21,2% menos que a finales de 2022. La compañía entregó 278.000 viviendas en el primer semestre, y promete seguir finalizando a tiempo las propiedades ya vendidas, en línea con los objetivos de Pekín, que ha marcado este aspecto como gran prioridad a las promotoras dadas sus implicaciones para la estabilidad social, ya que los bienes inmuebles son uno de los principales canales de inversión de las familias chinas.

Vencimientos de deuda

Las acciones de Country Garden cayeron hoy un 3,3% en la Bolsa de Hong Kong, de cuyo referencial será excluida el próximo 4 de septiembre después de haber perdido casi el 90% de su valor a lo largo de los últimos dos años. Este mismo mes, la compañía incumplió con el pago de un bono offshore y suspendió la cotización de otros once en China; el diario hongkonés South China Morning Post advirtió de que un impago podría tener un impacto “mucho más duro” que el de Evergrande en 2021, ya que Country Garden tiene cuatro veces más promociones.

En total, según estimaciones de JPMorgan citadas por South China Morning Post, Country Garden podría enfrentarse a más de 2.500 millones de dólares en vencimientos de bonos, tanto en China como en el extranjero, de aquí a final de año. La posición financiera de muchas inmobiliarias chinas empeoró después de que, en agosto de 2020, Pekín anunciase restricciones al acceso a financiación bancaria a las promotoras que habían acumulado un alto nivel de deuda, entre las que destacaba Evergrande con un pasivo de casi 330.000 millones de dólares. En los últimos meses, ante la coyuntura, el Gobierno anunció diversas medidas de apoyo, con los bancos estatales abriendo asimismo líneas de crédito multimillonarias a diversas promotoras.

Mercedes Cruz Ocaña