En el trascurso de una alucinante discusión, Bill Gates aconsejó a los emprendedores que empiecen a remunerar a la sociedad desde el principio.

Aplaudimos a personas como Warren Buffett, Bill y Melinda Gates y Mackenzie Bezos por firmar el Compromiso de Donación y jurar obsequiar la enorme mayoría de sus enormes fortunas. Pero estas personas son millonarios que no se semejan en nada al empresario promedio que recién empieza. ¿Deberíamos aguardar que los nuevos creadores los emulen en una escala considerablemente más pequeña?

Esa es una pregunta que Bill Gates abordó de frente a lo largo de una charla en la firma de capital peligro VC Village Global.

En el trascurso de una alucinante discusión de una hora que fue desde sus primeros años ofuscado con el trabajo (no aconseja su enfoque de no fines de semana o vacaciones) a su lista de lectura anual (verdaderamente desea que más personas lean libros), Gates asimismo abordó la cuestión de en qué momento los empresarios deberían empezar a meditar en remunerar a la sociedad.

Su contestación en resumen:

Impulsado por la moderadora, la creadora de Eventbrite, Julia Hartz, Gates comenzó la discusión al aconsejar que las nuevas empresas deberían centrarse en devolver desde el comienzo.

«Siempre trato de persuadir a las compañías de que deberían hacer donaciones de empleados, deducciones de nómina, que las organizaciones sin fines de lucro entren y hablen», afirmó Gates, ya antes de aconsejar «que diferentes unas partes de la compañía compitan para ser las más generosas» y ofrecer ocasiones a fin de que los empleados aprendan sobre las bastantes personas que luchan en situaciones bastante difíciles de la vida, de las que es simple olvidarse cuando trabajas en una start-up.

Luego la charla se volvió cara los creadores. Gates insistió que asimismo deberían empezar a dar, aun antes que tengan un buen tiempo y dinero para compartir. ¿Por qué merece la pena? Porque aprender a ser un filántropo efectivo es bastante difícil. Lo mejor es iniciar temprano.

«También creo que los creadores, pese a que no tendrán mucha liquidez, deben estimar la idea de seleccionar una causa local con la que estén comprometidos, en ocasiones con su cónyuge o en ocasiones no necesariamente, para aprender y practicar filantropía», Gates recomienda a los jóvenes emprendedores.

«Elija una escuela local, por poner un ejemplo, vaya y conozca a quienes están allá y cuáles son sus desafíos», sigue.

Gates piensa que edificar un negocio y después remunerar después sencillamente no marcha bien, «porque la filantropía es muy, muy diferente, ya que no hay señales de mercado y la experiencia en medir cosas es bien distinta».

Al igual que cualquier otra forma de conocimiento, la experiencia sobre de qué forma asegurar que su donación produzca impacto se edifica con el tiempo. O, en otras palabras, iniciar temprano lo va a ayudar a hacer una diferencia considerablemente mayor más adelante.

«Mark Zuckerberg, empezó a remunerar a la sociedad considerablemente más temprana, en sus treinta , al paso que hice mi donación conduzco a fines de los 40», apunta Gates. Debido a esto, probablemente Zuckerberg y su esposa Priscilla Chan hagan una diferencia aún mayor en el planeta.

Es posible que tenga muchos menos ceros en su saldo bancario que los Zuckerberg, mas exactamente el mismo principio se aplica a . Es por eso que los emprendedores deberían procurar, como sea que sea, ser como Zuck y empezar a remunerar, esencialmente, hoy.

Juan Pablo Cortez

Bogotá (Colombia), 1989. Apasionado por la investigación y el análisis de temas de interés público. Estudió comunicación social en la Universidad de Bogotá y posteriormente obtuvo una maestría en periodismo investigativo en la Universidad de Medellín. Durante su carrera, ha trabajado en diversos medios de comunicación, tanto impresos como digitales, cubriendo temas de política, economía y sociedad en general. Su gran pasión es el periodismo de investigación, en el cual ha destacado por su habilidad para descubrir información relevante y sacar a la luz temas que a menudo se mantienen ocultos.