En una notable resolución, el director de una start-up con sede en India ha tomado la valiente medida de despedir al noventa% de su personal de apoyo y
sustituirlos con un chatbot impulsado por inteligencia artificial. Summit Shah, creador y CEO de Dukaan, una compañía de comercio
electrónico con sede en Bangalore, aseveró que este chatbot es capaz de manejar las consultas de los clientes del servicio de forma considerablemente más veloz y eficaz que
sus empleados humanos.

Shah expresó su entusiasmo en Twitter al anunciar que el chatbot, desarrollado por uno de los científicos de datos de la compañía en solo un par de días,
podía administrar contestaciones instantáneas a las consultas iniciales de los clientes del servicio. En comparación, el personal humano de apoyo tardaba un promedio
de 1 minuto y cuarenta y cuatro segundos en mandar las contestaciones iniciales. Además, el chatbot redujo el tiempo promedio para solucionar los inconvenientes de los clientes del servicio
en prácticamente un noventa y ocho%. Estos resultados contundentes llevaron a Shah a tomar la bastante difícil mas precisa resolución de despedir a veintitres empleados en el mes de septiembre.

Aunque el motivo primordial tras los despidos fue la eficacia y la rentabilidad, Shah asimismo apuntó que el cambio de Dukaan de atender a
empresas más pequeñas a marcas orientadas al consumidor había disminuido la necesidad de llamadas o chat en vivo, lo que asimismo contribuyó a la
reducción del personal. En un esmero por continuar medrando, la compañía aún tiene vacantes en ingeniería, marketing y ventas, y busca contratar
personal para estos papeles.

Si bien Shah defiende la integración de la IA en su empresa y destaca la relevancia de la cooperación entre humanos e IA, reconoce que existe
cierta preocupación en torno a la pérdida masiva de trabajos debido a la automatización. Los miedos sobre el impacto de la IA en el mercado de trabajo se
han acentuado desde el lanzamiento del chatbot ChatGPT de Open AI, que ha probado ser capaz de administrar contestaciones largas y complejas en
una extensa pluralidad de temas. Si bien la IA puede progresar la eficacia y productividad, asimismo produce preocupaciones sobre la substitución de
trabajadores humanos por máquinas.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) advierte que los trabajos de baja y mediana calificación corren un mayor peligro
de automatización, y resalta que aun profesionales como médicos, abogados y operadores financieros pueden encontrarse bajo riesgo debido a la
capacidad mejorada de la IA para llenar labores no rutinarias. Esta inseguridad plantea preguntas esenciales sobre el futuro del trabajo y la
justicia social en un planeta impulsado por la IA.

Si bien el uso de la IA en la atención al usuario ha tolerado a Dukaan reducir los costos en un ochenta y cinco% y progresar la experiencia del usuario, existen
preocupaciones más extensas sobre los efectos en un largo plazo de la automatización en la sociedad. ¿Cuál va a ser el impacto en los trabajos y los ingresos de
las personas? ¿Deberíamos estimar la implementación de una renta básica universal para asegurar la seguridad económica en un planeta dominado por la
automatización? Estas son cuestiones complejas y bastante difíciles de abordar, y se precisa una discusión a nivel del mundo para hallar soluciones viables.

En última instancia, mientras que festejamos los avances en tecnología y los beneficios que pueden aportar, debemos estimar esmeradamente los aspectos
éticos, sociales y económicos de la IA. La integración de nuevos algoritmos y tecnologías en nuestra vida diaria plantea retos significativos, mas
asimismo abre nuevas ocasiones. La clave se encuentra en hallar un equilibrio conveniente entre el progreso tecnológico y el bienestar humano, y en
asegurarnos de que absolutamente nadie quede atrasado en este nuevo paisaje laboral en continua evolución.