Las inscripciones de Bitcoin Ordinals han aumentado en volumen desde abril. Y conforme más usuarios adoptan la tecnología, están anotando formatos de datos más complejos.
Las inscripciones simples basadas en texto dominaron en un inicio los ordinales de Bitcoin. Pero el sábado se efectuaron más de dieciocho con cero inscripciones por peticiones. Y otros géneros de inscripción ganan popularidad.
¿Qué son las inscripciones de Bitcoin Ordinals?
Los Ordinals de Bitcoin dejan a las personas anotar satoshis individuales con datos auxiliares.
La tecnología ha sido elogiada como un cambio de juego por la comunidad de Bitcoin pues deja a las personas registrar todo género de datos en la blockchain de Bitcoin.
Anteriormente, usar el libro mayor de Bitcoin de esa forma era difícil. En contraste a las blockchains multifuncionales más modernas, la red estaba bastante limitada a registrar transacciones financieras.
Uno de los primordiales atractivos de Bitcoin Ordinals es que dejan a los usuarios grabar diferentes formatos de datos on-chain, incluidos ficheros de vídeo e imagen. Como resultado, ahora es posible acuñar NFT de Bitcoin. También se han desarrollado un sinnúmero de otras funciones que ya antes no eran posibles.
Desde que se introdujeron los Ordinals en el primer mes del año de dos mil veintitres, se han efectuado prácticamente dieciseis millones de inscripciones. Estos han provocado que la blockchain de Bitcoin explote en tamaño.
Inicialmente, los Ordinals se empleaban en buena medida para hacer inscripciones básicas basadas en texto. Y en nuestros días, los trece millones de inscripciones impares basadas en texto representan más de las 3 cuartas unas partes del total.
Pero las clases alternativos de inscripción van en incremento.
Aumento de inscripciones de aplicaciones
Como muestra un panel de análisis de Dune, las inscripciones que no son de texto han aumentado últimamente. Las inscripciones de ficheros JSON y aquellos que caen en la categoría “otros” hoy día impulsan la tendencia a la diversificación.
Un formato de datos popular para aplicaciones web, el incremento de la prevalencia de las inscripciones JSON apunta al uso creciente de Bitcoin Ordinals por la parte de los desarrolladores de aplicaciones. Y el sábado, el número de Ordinals minteados por aplicaciones alcanzó un nuevo máximo de dieciocho con ciento quince.
Los Ordinals ahora han anotado más de ciento cuarenta con cero ficheros JSON en el libro mayor de Bitcoin. Eso lo transforma en el quinto género de datos más grande tras texto, “otro”, imágenes PNG e imágenes WebP.
La categoría “otros” incluye todos y cada uno de los formatos de datos que no se rastrean de otra forma. Su creciente volumen prueba aún más la diversificación de las inscripciones de los Ordinals.
Una consecuencia no deseada
Es posible que los primordiales desarrolladores y mineros que firmaron la actualización Taproot de la red en noviembre de dos mil veintiuno jamás hayan previsto las consecuencias de gran alcance de su resolución.
Gracias a esa actualización, los Ordinals han captado el interés de la comunidad global de Bitcoin, que ha admitido el término.
Después de todo, en la raíz, los diferentes formatos de datos digitales se fundamentan en código de computadora. En consecuencia, el proceso para redactar esos datos en la cadena es esencialmente exactamente el mismo.
Por supuesto, ciertos argüirán que los Ordinals no ofrecen grandes ventajas sobre las soluciones opciones alternativas, como las basadas en Ethereum. Pero eso no ha impedido que los desarrolladores experimenten con nuevos casos de uso de la tecnología.
Del mismo modo, las preocupaciones de que las inscripciones de Ordinals están obstruyendo la red de Bitcoin y incrementando las tarifas de transacción semejan haber hecho poco para frenar su desarrollo.
Monterrey (México), 1990. Estudió una licenciatura en comunicación y comenzó trabajando en medios locales de su ciudad, como periódicos, revistas, estaciones de radio o canales de televisión. Tiene un gran interés por la cultura mexicana, incluyendo la música, la comida y la historia. Es un apasionado de los deportes, especialmente del fútbol.