El Precio de la Plata Sufre Fluctuaciones Extremas: Claves Detrás del Caos del Mercado

El Precio de la Plata Sufre Fluctuaciones Extremas: Claves Detrás del Caos del Mercado

Todo comenzó con un sentimiento de desconfianza en los hermanos Hunt: Lamar, Nelson y Herbert. Herederos de un vasto imperio petrolero, fueron criados bajo la máxima de su padre, quien les enseñó a desestimar el papel moneda y a invertir solo en activos tangibles como el petróleo, los bienes raíces y los metales preciosos. Nelson, conocido como Bunker, sufrió una gran pérdida tras la expropiación de sus yacimientos libios en 1969. Esto lo llevó a concentrar sus esfuerzos en un solo metal: la plata. Entre 1973 y 1979, los Hunt acumularon aproximadamente 200 millones de onzas de este mineral, representando un tercio de la producción mundial en ese periodo. Esta estrategia provocó que los precios alcanzaran un hito histórico de 50 dólares la onza a principios de 1980.

Sin embargo, el mercado se desinfló rápidamente y los precios se desplomaron a solo 10 dólares por onza en cuestión de meses, llevando a la familia a la bancarrota. Pasaron 45 años para que se superara este récord, y hoy, la plata ha experimentado un impresionante aumento, superando los 74 dólares la onza, con una revalorización de más del 150% en menos de un año.

La Búsqueda de Refugio

Este resurgimiento de la plata se debe, en gran parte, a los altos precios del oro, que en diciembre de 2022 alcanzaron cifras récord de alrededor de 4,400 dólares la onza, haciendo que la plata se convierta en una opción más accesible. La creciente demanda de ambos metales preciosos proviene de la incertidumbre económica, donde los inversores buscan protección ante la pérdida de valor del dinero en efectivo debido a la inflación persistente y los déficits crecientes en los gobiernos.

Los bancos centrales están intensificando sus compras de oro y plata para diversificar sus reservas y disminuir su dependencia de los activos en dólares. Este entorno se ve potenciado por la alta demanda proveniente de China, donde la debilidad en su sector inmobiliario ha llevado a una migración de capital hacia los metales.

Además, un componente significativo del consumo de plata proviene del sector industrial, representando más de la mitad del consumo total. Soni Kumari, analista de ANZ, destaca que la demanda tecnológica y la transición energética, especialmente en la energía solar, están impulsando esta necesidad. Según Olen Hansen, estratega de materias primas en Saxo Bank, la plata ha finalmente encontrado su lugar como un metal monetario y un insumo industrial en 2025, pero el problema persiste: no hay suficiente plata en el mercado.

La producción de plata se encuentra en un déficit constante, proyectando su quinto año consecutivo en esta situación. La oferta es inelástica, ya que gran parte de la plata se extrae como subproducto de otras operaciones mineras, lo que limita su capacidad de respuesta a fluctuaciones de precio. Entre el 70% y el 80% de la producción mundial proviene como subproducto de la extracción de plomo, zinc, cobre y oro. Este año, la producción ha disminuido cerca de un 3%, agraviando el problema.

En respuesta a esta escasez, Estados Unidos ha clasificado la plata como un mineral crítico, promoviendo aún más su valorización. Ewa Manthey, experta en materias primas en ING, señala que las expectativas de aranceles han llevado a un movimiento significativo de plata desde Londres hacia EE.UU., resultando en un descenso inédito de reservas en la capital británica.

La Presión Creciente en el Mercado

La tensión en el mercado se evidencia en la reducción de las reservas físicas almacenadas en Londres. Esta presión ha provocado que las reservas vinculadas a la Bolsa de Futuros de Shanghái alcancen niveles mínimos en casi una década, y se ha debido un gran volumen hacia Londres para equilibrar la situación.

La fuerte demanda de inversores ha tenido un impacto directo, especialmente en los fondos cotizados en bolsa (ETF) respaldados en plata, que han experimentado su mayor entrada en tres años. Sin embargo, gran parte de esta demanda proviene de inversores minoristas, mientras que los institucionales aún se centran en el oro como su principal opción de inversión.

Con un volumen de negociación en plata de 8 a 10 veces menor que el del oro, la volatilidad seguirá siendo elevada. Cualquier corrección en el oro a menudo decidirá movimientos mucho más pronunciados en la plata. «La plata es como ‘oro con esteroides’, lo que la hace más sensible a cambios económicos», destaca Manthey.

A medida que avanzamos hacia 2026, las proyecciones sugieren que los precios de la plata se mantendrán estables, especialmente si la Reserva Federal de EE.UU. sigue con su política de recortes de tipos de interés. Esta flexibilidad monetaria tiende a debilitar el dólar, lo que a su vez incrementa la demanda de inversión en metales preciosos como la plata y el oro.