Oracle enfrenta un desafío tras decepcionar al mercado. Las acciones del reconocido gigante tecnológico cayeron más del 12% en operaciones fuera de hora tras anunciar un incremento de 15.000 millones de dólares en su inversión para el desarrollo de centros de datos de inteligencia artificial (IA). Este aumento en gastos, más prolongado de lo que esperaban los inversores, ha generado inquietudes sobre su capacidad para convertir esas inversiones en ingresos tangibles.
Aumento en el gasto y decepción en cifras
Recientemente, Oracle ha adquirido un papel protagónico gracias a sus planes ambiciosos de construir centros de datos en la nube dedicados a la IA. Sin embargo, los resultados económicos obtenidos en el último trimestre no han logrado satisfacer las expectativas del mercado. Durante el segundo trimestre fiscal, que concluyó el 30 de noviembre, la compañía reportó un crecimiento del 34% en las ventas de la nube, alcanzando los 7.980 millones de dólares. Por su parte, los ingresos generados por su negocio de infraestructura aumentaron un impresionante 68%, totalizando 4.080 millones de dólares. No obstante, ambas cifras se quedaron por debajo de las proyecciones de los analistas.
Oracle estimó que su beneficio ajustado para el próximo trimestre oscilará entre 1,64 y 1,68 dólares por acción, una cifra menor a los 1,72 dólares inicialmente anticipados.
Crecimiento masivo y retos financieros
Conocida principalmente por su software de bases de datos, Oracle está viendo crecer su participación en el competitivo entorno de la computación en la nube. La empresa planea expandir significativamente su infraestructura de IA, ofreciendo servicios a grandes plataformas como TikTok y Meta. Los ejecutivos de Oracle han afirmado que esperan que sus gastos de capital ascendieron a unos 50.000 millones de dólares para el año fiscal que finalizará en mayo de 2026, lo que representa un notable aumento respecto a sus proyecciones anteriores.
Sin embargo, Wall Street está comenzando a cuestionar la sostenibilidad de estos gastos y los plazos necesarios para rentabilizar una infraestructura de IA tan extensa. Actualmente, Oracle ha acumulado deudas significativas, mientras se compromete a arrendar múltiples centros de datos.
Las reservas de la compañía en el último trimestre superaron los 523.000 millones de dólares, cifra que supera las estimaciones de los analistas, que esperaban 519.000 millones.
Perspectivas inciertas para los inversores
Jacob Bourne, analista de Emarketer, ha comentado que la firmeza financiera de Oracle está siendo puesta a prueba debido a la creciente dependencia del financiamiento mediante deuda para la construcción de centros de datos y la incertidumbre en torno a los gastos en IA. Los inversores son cautelosos y quieren observar cómo la compañía convertirá su creciente gasto en infraestructura en ingresos pronto, conforme a sus promesas.
Durante el último trimestre, Oracle gastó aproximadamente 12.000 millones de dólares en capital, un aumento notable en comparación con los 8.500 millones del antecedente trimestral. Aunque los analistas esperaban que ese gasto se mantuviera en unos 8.250 millones, la compañía tuvo que justificar que la mayoría de estas inversiones están destinadas a equipos generadores de ingresos.
Se prevé que los ingresos anuales alcanzarán los 67.000 millones de dólares, manteniendo las proyecciones hechas en octubre. Sin embargo, la preocupación persiste sobre el alto costo del capital y las necesidades de deuda inciertas, que están generando desconfianza entre los inversores.
Con un flujo de caja libre negativo de 10.000 millones y una deuda total de aproximadamente 106.000 millones, la situación financiera de Oracle se está volviendo un tema candente. Desde el 10 de septiembre, las acciones de la empresa han perdido en torno a un 33% de su valor, un reflejo de los sentimientos negativos en el mercado.
Cambios en la dirección y la competencia
Este reporte marca el primer resultado financiero bajo la nueva dirección compartida de Clay Magouyrk y Mike Sicilia, tras la salida de la histórica CEO Safra Catz. Parte de la desconfianza de los inversores también se vincula a la creciente competencia que OpenAI enfrenta por parte de gigantes como Google, lo que crea un entorno de incertidumbre sobre las proyecciones de ingresos.
En conclusión, aunque Oracle muestra un crecimiento constante en sus ingresos totales —un aumento del 14% hasta los 16.100 millones de dólares—, el mercado permanece alerta ante los desafíos financieros que enfrenta, especialmente en el ámbito de la inteligencia artificial. La atención se centra ahora en su capacidad para pivotar y ajustar sus planes estratégicos en un contexto tan cambiante.
